Ocupación mapuche: los acusados de matar a Elías Garay en Cuesta del Ternero seguirán presos
La defensa pidió la libertad de los dos imputados y en caso de que no se hiciera lugar al pedido, la prisión domiciliaria. La fiscalía resaltó que hay una investigación en curso y quedan pendientes varias medidas importantes para la causa.
El juez Víctor Gangarrosa dispuso la prórroga de la prisión preventiva para Diego Ravasio y Martín Feilberg, imputados por el homicidio de Elías Garay en el predio de Cuesta del Ternero ocupado por la comunidad Quemquemtreu en noviembre del año pasado. Continuarán detenidos en el Penal 1 de Viedma hasta la audiencia de control de acusación.
Ante el vencimiento del plazo de cuatro meses de prisión preventiva, el fiscal Francisco Arrien pidió la prórroga de la medida cautelar. «La investigación aun está en marcha porque vence en abril. Está la posibilidad de que los imputados puedan influir sobre los testigos o destruir objetos de prueba que aun no se han podido hallar. No se ha hallado el arma con la cual se produjo el crimen y un drone importante para la causa», manifestó Arrien.
Consideró contraproducente la libertad de Feilberg y Ravasio en «el avance de la investigación. Quisiera recordar que los imputados huyeron del lugar. No fueron a pedir ayuda a la policía, no hicieron la denuncia. El delito es grave y la prisión preventiva tiene como fin garantizar los fines del proceso».
Gangarrosa hizo lugar al pedido y consideró que «la materialidad del hecho se encuentra acreditada«. «La fiscalía ha podido demostrar que hay una investigación en curso y que en el marco de esa investigación aun restan medidas por realizar como el secuestro del arma y drone. Queda recabar entrevistas a personas testigos de los acontecimientos», dijo.
Los abogados querellantes, Andrea Reile y Ezequiel Palavecino, adhirieron al planteo de la Fiscalía y resaltaron el temor de testigos como Gonzalo Cabrera -que recibió un impacto de bala el día que mataron a Garay- y Nadia Silvera, la pareja de la víctima, afectada por un problema de salud. «Estamos intentando que se animen a declarar. Nos encontramos en etapa plena de investigación. Nos falta el arma con la que mataron a Garay. No dijeron a dónde se encuentra«, indicó Palavecino.
La defensa de Ravasio solicitó una morigeración de la prisión preventiva con prisión domiciliaria. Estanislao Cazaux argumentó que «es difícil ejercer el derecho de defensa al estar en el Penal de Viedma ya que resulta imposible comunicarse con el establecimiento. Llamo de forma constante y es imposible. La detención domiciliaria permitirá el monitoreo constante que pide el Ministerio Público y la querella».
En relación a este reclamo, Gangarrosa ordenó librar un oficio al director del Penal 1 «a fin de recomendar que habilite los medios de comunicación necesarios para que los defensores mantengan contacto con los defendidos».
A su turno, el abogado defensor Ernesto Saavedra solicitó «la inmediata libertad» de Feilberg y en caso de que no se concediera, «una morigeración» de la medida cautelar. «La prisión es una medida preventiva que ahora se intenta prolongar con argumentos reiterados. Ya dieron cuatro meses. Tuvieron cuatro meses para hacer todas las medidas de investigación. Ahora hay una reiteración de argumentos», planteó.
«La cárcel -continuó- es una medida extrema y con sentencia. ¿Cuál es el sentido de mantenerlos en prisión? Es constituir un adelantamiento de la pena».
Respecto a los pedidos de la defensa, Arrien concluyó que «la prisión preventiva domiciliaria es una medida excepcionalísima. Se produce en algunos casos puntuales. Hemos tenido muchas audiencias donde se ha ejercido el derecho de defensa sin ningún tipo de limitación».
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