Maltrato en la infancia en Neuquén: «las guardias de la defensoría se mantienen»
Continúa la polémica por un protocolo de la defensoría pública respecto del tratamiento de niños y niñas en riesgo después del horario de atención al público. La falta de recursos, una constante en todas las áreas.
El informe fue elaborado por el Observatorio Argentinos por la Educación. Foto: archivo
La defensoría de los Derechos del Niño, Niña y Adolescente salió a aclarar que las guardias del organismo se mantienen, y que «atendemos el teléfono las 24 horas», pero ratificó que el primero que debe intervenir en caso de infancias en riesgo «es el Ministerio de Desarrollo Social, que es el órgano de aplicación de la ley 2302″.
La alarma la encendieron organizaciones en defensa de los derechos de las infancias y adolescencias de Neuquén a raíz de un protocolo de la Defensoría Pública que firmó su titular, Vanina Merlo, y según dicen «vulnera el acceso a la justicia de niños, niñas y adolescentes tal cual lo garantiza la Ley Provincial 2302 de Protección Integral de Niñez y Adolescencia».
Mónica Belli, médica pediatra y con formación en la problemática del maltrato infantil, dijo a este medio que «Desarrollo Social no tiene equipos ni personal capacitado para atender la demanda. Están con medidas de fuerza por reclamos salariales y no atienden el teléfono».
La defensora de los Derechos del Niño, Niña y Adolescente Natalia Stornini afirmó lo contrario. «El personal asignado por Desarrollo Social está integrado por profesionales, psicólogos, asistentes sociales, y siempre atienden, nunca hemos tenido problemas con la intervención».
Mal uso o abuso de los recursos
En diálogo con Río Negro, señaló que el protocolo que provocó la polémica «es ordenatorio, para que cada institución haga lo que corresponde. Estamos acomodando el circuito porque se hizo mal uso o abuso de determinados recursos».
El sistema de protección integral de las infancias es una red que componen: Ministerio de Desarrollo Social, Ministerio de Salud, hospitales y centros de salud, Ministerio de Educación, escuelas, organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, fuerzas de seguridad, la comunidad en su conjunto, las Defensorías de los Derechos de NNyA y los juzgados de Familia.
«Antes nos llamaban para que nosotros llamemos al Ministerio», continuó Stornini. La intervención de la Defensoría se limita a cuestiones específicas: por ejemplo, la separación de un niño o niña en riesgo de sus padres. Esa medida la dispone el juzgado de Familia a pedido de la defensora.
Escasez de recursos
Ante una consulta, Stornini admitió que «a todos nos faltan recursos porque trabajamos con una temática sensible, urgente, todos necesitan el ahora, el ya. Les faltan recursos a la línea 102, a los hospitales, a todos».
Y aseguró que «si Desarrollo Social no pone los recursos suficientes, se puede interponer una medida judicial. Yo lo hice cuando era defensora en Cutral Co».
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