Juicio a Emiliano Gatti: no se sabe si declarará el periodista en la causa por tenencia de imágenes de abuso infantil
Hoy serán los alegatos de clausura en el juicio que se le sigue al extrabajador de Canal 10 que podría ser condenado a una pena de cumplimiento efectivo de 4 años de prisión.
El juicio contra el periodista se lleva adelante en los tribunales de Roca. Foto: archivo.
Hasta anoche no estaba definido si el periodista Emiliano Gatti declararía en el juicio que se lleva adelante en los juzgados de Roca por tenencia y facilitación de imágenes de abuso infantil. Hoy será los alegatos de clausura y será la última oportunidad que tenga para hablar frente al tribunal que integran los jueces Luciano Garrido, Verónica Rodríguez y Emilio Stadler.
Hoy será la sexta jornada del juicio contra el extrabajador de Canal 10 a quien a fines del 2022 le allanaron su domicilio particular y le secuestraron sus dispositivos electrónicos que contenían imágenes de abuso sexual infantil, según detallaron durante el proceso las representantes del Ministerio Público Fiscal.
Hasta anoche sus abogados tenían prevista la declaración de Gatti aunque la determinación final no estaba adoptada. «Todavía no lo tenemos definido y lo haremos a último momento según cómo veamos el panorama del juicio», explicó sobre el cierre de la jornada el abogado Joaquín Hertzriken Velasco.
Qué pasó ayer?
Ayer se conocieron los detalles de los primeros pasos que dio el Ministerio Público Fiscal (MPF) de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para abrir el proceso y fueron brindados por la abogada Cecilia Chiodi, quien encabezó el grupo que terminó por identificar a tres personas en el territorio rionegrino a las cuales se les allanó sus domicilios en noviembre del 2022.
La operación que investigaba a Gatti se abrió en julio del 2021 y se extendió hasta agosto del 2023. Contó que durante ese lapso se elaboraron los «objetivos» de los informes en conjunto con otras áreas como el Laboratorio Informático para rastrear los movimientos en las plataformas ICACCOPS (Internet Crimes Against Children Child Online Protection Systems) y CPS. Estos dos organismos permiten detectar en las distintas plataformas a los usuarios que intercambian este tipo de materiales a través de sus búsqueda.
De esa búsqueda surgieron los primeros informes en Argentina donde se detectaron en un principio 92 objetivos de los cuales cinco eran de Río Negro. Y se les asignaron identificaciones desde el F65 al F69. Gatti resultó ser el F66, según Chiodi y remarcó que la última vez que accedió a la red fue el 12 de abril del 2022 seis meses antes de que le allanaran la casa.
Al igual que ocurrió con los peritos informáticos del MPF y del Poder Judicial de Río Negro, Chiodi dio detalles inequívocos sobre el camino que habría trazado el periodista en la plataforma eMule, donde habría descargado esos 50 videos de imágenes de abuso sexual infantil. Habló de las siglas, y la manera a través de las cuales estos usuarios llevan adelante esas búsquedas.
Testigos de la Defensa
Tras esa declaración comenzaron a desfilar los testigos de la defensa. Entre ellos apareció el testimonio de Miguel Alsina, técnico en electrónica, quien además de ser compañero de Gatti en Canal 10, le reparó una computadora que había sufrido un desperfecto. Contó que en julio del 2022 le arregló la PC junto a su hijo donde se le cambió un disco rígido que presentaba fallas.
Dijo que sustituyeron el disco rígido y que luego salvaron el contenido del disco dañado para pasarlo a un disco nuevo. «Sólo se hizo una copia de respaldo», sostuvo en su exposición aunque a pedido de la fiscalía detalló que nunca hizo una en pen drive o bien otro tipo de dispositivo.
También declaró una mujer quien era amiga y compañera de trabajo de Emiliano Gatti en el canal provincial. Sostuvo que mantuvo un vínculo fluido de amistad pero que nunca observó alguna actitud que tenga que ver con los delitos que se le imputan. Aclaró que el periodista vivió en su casa varios días y que en ningún momento mostró una actitud que le hiciera sospechar sobre la tenencia o búsqueda de imágenes de abuso infantil. «Si lo hubiera detectado no lo hubiera dejado entrar nunca», advirtió.
Sobre el final de la audiencia los abogados defensores Marcelo Hertzriken Velasco y Joaquín Hertzriken Catena solicitaron al tribunal escuchar el audio de la entrevista que le realizó una periodista de Viedma a la fiscal Belén Calarco. Allí la representante del MPF brindó detalles de varios de los videos hallados en la computadora de Gatti y describió cada uno de ellos aunque para ese entonces al periodista ni siquiera le habían formulado cargos. Esa acción le valió que el Procurador Jorge Crespo la reemplace en la investigación que finalmente quedó en manos del la Fiscal Jefe, Graciela Echegaray.
Que dijeron las exparejas de Gatti
Pero en la audiencia hubo otros dos testimonio aportados por la defensa. Uno de ellos trazó un perfil de Gatti que hasta el momento no había sido dejado en evidencia por los testigos que pasaron durante el proceso.
El primero fue de una expareja, que actualmente vive en Monte Grande, y que mantuvo una relación con el periodista en los meses previos al inicio de la pandemia, en el 2022. Luego regreso a su ciudad natal, Bahía Blanca, donde actualmente también reside Gatti.
El hombre, del cual este medio se reserva la identidad, dijo que «jamás» lo vio navegar en contenidos de abuso sexual infantil. «Yo no tengo palabras (para describirlo) estoy muy agradecido siempre fue muy atento. No tengo nada que decir de él», dijo esta persona quien compartió tres meses la vivienda con el periodista aunque el vínculo se extendió por seis meses.
«Me quisiste manipular un poco», le reprochó de manera contundente el testigo a la fiscal cuando lo consultó sobre cómo había sido la relación de la pareja en una charla previa que tuvieron ayer. «Pero fue un lujo, me llevaba muy bien. Nada que decir», le respondió a la representante del Ministerio Público Fiscal.
Igualmente aclaró que mientras convivió con Gatti no manipuló ningún dispositivo. «Mi celular nomás«, sentenció.
El último testimonio fue de una pareja que mantuvo una relación con Emiliano Gatti entre 2010 y 2014, muchos años antes de que se comience la investigación por tenencia y facilitación de imágenes de abuso sexual infantil.
El hombre, que es médico y reside en la zona cordillerana, mantuvo una relación mientras él vivía en Cipolletti y Gatti en Neuquén. Aseguró que en ningún momento advirtió que tuviera o navegara en contenidos de ese tipo. «Tampoco fue tema de charla», aclaró.
Además explicó que en los años de pareja en muchas oportunidades tuvo acceso a la computadora del conductor televisivo, aunque nunca detectó ni imágenes ni videos de abuso infantil.
La última pregunta estuvo a cargo de la abogada querellante Gabriela Prokopiw. «¿Recuerda que en la charla que tuvimos ayer usted habló del consumo que tenía el señor Gatti…?», consultó.
El médico fue contundente en su respuesta; consumía «mucha pornografía» y además los problemas de la pareja estaban centrados en la «infidelidad».
Qué delito se le imputa
A Emiliano Gatti lo acusan de los siguientes delitos: facilitación de imágenes de abuso sexual infantil (en 50 hechos), agravada por la edad de las víctimas (menores de 13 años), en concurso ideal con tenencia de imágenes de abuso sexual infantil (50 hechos), agravada por la edad de las víctimas (menores de 13 años); ambas en concurso real con tenencia con fines inequívocos de distribución (50 hechos), en carácter de autor (arts. 45, 54, 55 y 128 párrafos primero, segundo, tercero y quinto del CP). Por estos hechos podría ser condenado a una pena mínima de 4 años de prisión.
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