Femicidio de Eduarda Santos: la médica psiquiatra consideró que hubo planificación
La médica psiquiatra Verónica Martínez dio a conocer el informe psicológico de Amanda Alves Ferreira, imputada por el crimen de la joven brasileña en Circuito Chico.
“Si las opciones son que hubo un acto planificado o un acto de un arrebato emocional, mi conclusión es que estamos más cerca de una planificación. Que uno diga planificación no quiere decir que sea un plan perfecto”. La psiquiatra forense Verónica Martínez brindó un perfil psicológico de Amanda Alves Ferreira, imputada por el crimen de la joven brasileña Eduarda Santos de Oliveira el 16 de febrero del 2022.
La médica recordó que la autopsia determinó nueve orificios de bala en el cuerpo de la víctima. “Hablamos de un arma que solo puede cargar seis proyectiles. Entonces, si hablamos de seis proyectiles y nueve orificios quiere decir que, en algún momento, hubo que tener lucidez para recargar el arma”, dijo Martínez.
Recalcó también que el lugar del crimen era una zona boscosa y oscura. “Asestar nueve disparos en la oscuridad sobre el cuerpo de Eduarda, no sé”, manifestó.
“Diga qué es lo que no sabe”, le insistió el fiscal jefe Martín Lozada. “Y, hay aptitud para disparar”, le respondió.
La médica explicó que el perfil de Alves Ferreira se logró a partir de dos entrevistas “semiestructuradas” que se extendieron por unas cuatro horas el año pasado. Mencionó que esos datos permiten aportar un perfil de la persona y una evaluación de su estado psíquico en ese momento.
A lo largo del relato de Alves Ferreira, Martínez advirtió contradicciones en torno a su relación con su pareja -Marcelo Ramírez- y con Eduarda Santos. “En lo vinculado a su esposo, refirió que al principio la relación era casi perfecta. Transcurrida la entrevista, dijo que la relación era abusiva y estaba siendo violentado. Dijo que había sido abusado y violentado económicamente por Marcelo”, destacó.
Respecto a Eduarda, Martínez habló de “una relación amor odio”: “La describe como mejor amiga, que había ofrecido su vientre para engendrar a sus hijos, una relación amorosa y de repente estaban en una posición de enemigos”.
Una de las consultas por parte de Lozada fue por el estado psicológico de Alves Ferreira en el momento de las entrevistas. Martínez aseguró que estaba “correctamente lúcido y bien orientado”. Planteó que no encontró “alteraciones de las funciones psíquicas básicas” aunque detectó “ideas de carácter paranoide” propias de “alguien que tiene desconfianza”.
Durante su testimonio, Martínez dijo haber evaluado cuestiones de impulsividad. “Cuando aparecen conductas violentas, uno dice que fallaron los frenos inhibitorios. Eso ocurre en personas intoxicadas o, en personas con epilepsia. En el hecho que se investiga, los frenos inhibitorios funcionaban adecuadamente. No encontré que fuera portador de una patología psiquiátrica o mental grave”, concluyó.
Por último, Lozada consultó si durante las entrevistas, en algún momento, Alves Ferreira hizo referencia a su autopercepción como mujer. Martínez respondió en forma negativa. “¿Pidió que la llamen Amanda?”, insistió el fiscal y obtuvo otra respuesta negativa por parte de la médica.
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