Crimen del soldado de Zapala: «El juez intentó ensuciar la memoria de nuestro hijo»
El padre de Pablo Córdoba reiteró que "los asesinos y los encubridores están en el cuartel". La madre prometió que "no vamos a bajar los brazos".
Una nueva marcha reclamó justicia por el crimen de Pablo Córdoba en Zapala. (Archivo)
Hace 8 meses, el soldado voluntario Pablo Jesús Gabriel Córdoba de 21 años, cumplía guardia en el Grupo de Artillería 16 de Zapala cuando recibió dos balazos en diferentes lugares de la cabeza. Hasta ahora no hay sospechosos, pero el padre de la víctima, el suboficial principal Juan José Córdoba, reiteró que «los asesinos y los encubridores están dentro del cuartel, y lamentablemente visten el mismo uniforme que yo. Eso duele más».
Natalia Uribe, la mamá de Pablo, afirmó por su parte con lógica de hierro: «Si el asesino fuera de afuera del Ejército estarían todos los militares preocupados porque alguien ingresó a cometer semejante aberración».
Los padres encabezaron una nueva marcha que se realizó en Zapala para reclamar justicia por el crimen y volvieron a criticar al juez federal subrogante Hugo Greca, quien dirige la investigación.
«Todo lo que hizo durante estos 8 meses fue tratar de ensuciar la memoria de nuestro hijo, intentando por todos lo medios cerrar la causa como un suicidio, pero no se lo permitimos ni lo vamos a permitir», dijo Juan José en la puerta del juzgado.
El edificio ubicado en la esquina de Zeballos y Brown estaba vallado y con fuerte custodia policial. El único detenido que tuvo la causa fue un docente que realizó pintadas en las paredes para reclamar justicia.
«Mal desde el principio»
«Todo está mal desde un principio», dijo Juan José. Recordó que «las reuniones de los mandos del Ejército con Greca están comprobados por ellos mismos. Sabían cada paso que daba el juez. De parte de mi institución, a la que sigo sirviendo, recibí intimidaciones por el solo hecho de pedir justicia por mi hijo, aduciendo que mi reclamo manchaba a la institución. ¿Qué cosa no?».
Dirigiéndose al juez, preguntó: «¿Por qué no investiga bien? ¿No quiere saber cuáles fueron las armas homicidas?. Estoy seguro que fueron dos armas».
Los proyectiles que provocaron la muerte del soldado no fueron recuperados, por lo que se desconoce su calibre.
«El dolor que causaron al asesinar a Pablo es muy fuerte, pero los familiares, amigos, vecinos, nos dan la fuerza para seguir en la búsqueda de la verdad y la justicia», continuó Juan José. «Estos 8 meses golpearon muy fuerte de todos lados, tratando de desviar la investigación, mintiendo, ignorando evidencias, dejando escapar pruebas. Cuando descubramos la verdad van a cambiar muchas cosas y así Pablo va a poder descansar en paz».
Piden otro cambio de carátula
Por su parte Natalia, en diálogo con RÍO NEGRO RADIO, dijo que esperan que el juez Greca cambie otra vez la carátula de la causa, de «homicidio simple» a «homicidio agravado por el uso de arma de fuego».
«Vemos pasividad en el juez Greca. Se perdió mucho tiempo al principio y hoy se sigue dilatando, por lo menos tendría que haber personas detenidas», afirmó.
Natalia dijo que «hay más de un involucrado en lo que le hicieron a mi hijo. Son militares, no fue algo entre soldados, hay personal superior involucrado. Dentro del Ejército siguen hablando de un suicidio, cuando todas las pruebas indican lo contrario. Acá hay gente que sabe, que está encubriendo».
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