Condenan a un agente que usaba la inmobiliaria de un candidato de Milei para estafar en Fernández Oro
El empleado recibió una pena de tres años de prisión en suspenso. Utilizaba documentos falsos para vender terrenos.
El juez Julio Sueldo intervino en el proceso (foto arhivo)
Un empleado utilizó la inmobiliaria del excandidato a intendente de Javier Milei en Fernández Oro para concretar estafas millonarias. Gonzalo Bancala, quien trabajaba en la firma Molina-Lagos, concretaba las operaciones fraudulentas en las oficinas de la empresa situada en la esquina de Mitre y Roca de Oro.
En un juicio abreviado reconoció los delitos y fue condenado a tres años de prisión en suspenso. Bancala pedía señas para vender terrenos en dos loteos que desarrolla Molina-Lagos: El Sol y Santa Clara.
¿Nadie de la empresa controlaba las actividades de Bancala? Aparentemente no porque el propio Daniel Molina, propietario de la inmobiliaria, relató que el agente se aprovechó la confianza, las instalaciones y el prestigio de la firma para concretar las operaciones fraudulentas.
Molina es un reconocido empresario inmobiliario de la región que logró mayor repercusión mediática el año pasado con su candidatura a intendente. Se unió al sello provincial libertado «Primero Río Negro» que impulsó el experonista Ariel Rivero.
El fallo judicial expone los detalles de un esquema fraudulento que Bancala llevó a cabo durante 2022 en las oficinas de la inmobiliaria situada en la esquina de Mitre y Av. Roca de Fernández Oro.
Los jueces determinaron que hombre utilizó contratos y recibos falsos para engañar a varios compradores que buscaban adquirir terrenos en los loteos «El Sol» y «Santa Clara», desarrollados por la firma Molina-Lagos. En algunos casos, las estafas incluyeron sumas de dinero en dólares y vehículos como parte de pago. El fallo expuso cómo Bancala defraudó a al menos siete personas mediante la simulación de contratos de compraventa de terrenos y vehículos.
Molina, dueño de la inmobiliaria y excandidato a intendente por el partido de Javier Milei, declaró en el juicio que Bancala actuaba por cuenta propia y que la empresa no estaba involucrada en las operaciones fraudulentas.
Se desligó de las estafas y argumentó que su inmobiliaria nunca tuvo relación alguna con las ventas que el agente realizaba a nombre propio. Aseguró que, al descubrir las primeras quejas de los clientes, decidió desvincularlo de la firma y presentó toda la documentación correspondiente ante las autoridades.
La Fiscalía, representada por Giovanna Moro, detalló cómo Bancala utilizaba las oficinas de la inmobiliaria y la reputación de Molina para generar confianza entre los compradores. El juicio se desarrolló mediante audiencias virtuales y concluyó con un acuerdo entre las partes. Julio Sueldo fue el juez que intervino en el proceso.
El imputado aceptó su responsabilidad en los delitos de defraudación y estafa. Fue condenado a tres años de prisión en suspenso, con pautas de conducta estrictas que incluyen la prohibición de consumir alcohol y drogas, y la obligación de presentarse periódicamente ante el Organismo Administrativo de la provincia de Neuquén.
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