Antes de irse, Alberto Fernández firmó el aval para extraditar a Jones Huala
El expresidente firmó la resolución que dispone ejecutar la extradición del referente mapuche a Chile, que lo reclama para que termine de cumplir la condena que le impuso la Justicia del vecino país. Falta que el juez Villanueva defina si está en condiciones de salud para su traslado.
Jones Huala regresó al país. Foto: archivo Alfredo Leiva.
Tres días antes de que finalizara su mandato, el expresidente Alberto Fernández le puso punto final al proceso de extradición del referente mapuche Facundo Jones Huala.
El expresidente firmó el 7 de diciembre pasado la resolución que dispone el traslado de Jones Huala a Chile, que lo reclama para que termine de cumplir la condena que la Justicia del vecino país le impuso al dirigente mapuche. Así lo informó el abogado Eduardo Soares que asistió a Jones Huala en todo el proceso judicial por la extradición a Chile.
El integrante de la Asociación Gremial de Abogados de la República Argentina informó que solo falta que personal de Interpol traslade a Jones Huala hacia Chile y “que el juez federal (Gustavo Villanueva) diga si Facundo está en condiciones de salud para viajar”.
El estado de salud de Jones Haula, que reivindica la existencia de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), es un asunto clave porque hace varias semanas inició una huelga de hambre sin líquidos.
La semana pasada, Jones Huala ingresó al hospital de Esquel porque su estado de salud estaba deteriorado por la huelga que decidió hacer como forma de protesta.
Cumplir lo que resta de la condena en Argentina
La intención del referente mapuche, de 37 años, era cumplir los meses que le faltan de la pena impuesta por la Justicia chilena en Argentina, pero con la decisión última del expresidente Fernández esa posibilidad quedó descartada.
Jones Huala fue juzgado y condenado el 21 de diciembre de 2018 por la Primera Sala No Inhabilitada del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Valdivia, Chile. Ese tribunal condenó a Jones Huala a la pena de 6 años de prisión por haber sido uno de los autores de un incendio de propiedades en un fundo ubicado en la región de Los Ríos, Chile, y a 3 años y 1 día de prisión por la tenencia ilegal de arma de fuego de fabricación artesanal.
La Corte Suprema confirmó el 14 de noviembre pasado el fallo de Villanueva. Aunque la Corte advirtió que la Justicia chilena deberá computar el tiempo que lleva detenido con prisión preventiva en Argentina.
El dirigente mapuche fue juzgado a finales de julio pasado en Esquel por Villanueva, que subroga el juzgado federal de Bariloche. El magistrado declaró procedente su extradición que fue requerida por el Estado chileno. Los defensores particulares de Jones Huala apelaron esa sentencia, pero la Corte la confirmó.
Jones Huala deberá cumplir el saldo de pena de un año, cuatro meses y diecisiete días de prisión que le faltaban cuando se escapó de Chile. Pero si se descuentan los meses que lleva detenido ese plazo se reduce.
La detención en El Bolsón
El referente mapuche fue arrestado el 30 de enero pasado en un domicilio de El Bolsón. Después, fue trasladado al penal federal de Esquel donde se encuentro detenido.
Jones Huala fue sometido a un primer juicio de extradición en febrero y principios de marzo de 2018. Y el juez Villanueva dictó una sentencia que admitió extraditarlo a Chile que lo requería para juzgarlo por un ataque incendiario a una propiedad ubicada en un fundo en la zona de Río Bueno, región de los Ríos. Y también por la tenencia ilegal de armas de fuego fabricación casera que la Brigada de Investigaciones de Chile halló a finales de enero de 2013 en un allanamiento en el domicilio donde Jones Huala pernoctaba en Chile. Fue extraditado en septiembre de 2018.
Fue juzgado y condenado a finales de 2018 en Chile. La condena comenzó a ejecutarse el 23 de abril de 2019. Un tribunal de Chile le concedió el 21 de enero de 2022 la libertad condicional, pero la Corte Suprema del vecino país revocó el 15 de febrero del año pasado ese beneficio, pero Jones Huala no compareció, porque se había fugado hacia la Argentina. Por eso, la Justicia chilena decretó su rebeldía y libró la respectiva orden de detención.
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