Juicio a la megabanda: un testigo vinculó a un dirigente de la Fruta con Forno

Las vinculaciones entre la megabanda de boqueteros y el Sindicato de la Fruta que se rumorearon apenas fueron detenidos en mayo de 2016 quedaron ayer en evidencia cuando el suboficial Osvaldo Sánchez terminó por confirmarlas: “Hay muchas escuchas telefónicas en las que Forno –el supuesto líder– habló con Lezcano –dirigente del gremio– para venderle la camioneta que hacía un tiempo habían robado en un violento asalto”.

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Todas las sospechas quedaron confirmadas con la declaración de uno de los integrantes de la Brigada de Investigaciones de Cipolletti cuando apuntó directamente contra Lezcano y la vinculación que tuvo con José “Chiqui” Forno. “Lo llamaba para ofrecerle la camioneta. Fueron varias veces que hablaron hasta que Lezcano la compró”, indicó el suboficial Sánchez, quien fue parte de la investigación.

La camioneta era una Toyota SW4 que había sido robada de la casa de un conocido abogado de Cipolletti en febrero de 2016. El robo fue uno de los más violentos. Entraron entre 4 y5 personas, maniataron a la mujer y a su hija y después de no haber encontrado el dinero que buscaban se fueron en la camioneta. El dueño de casa estaba limpiando la pileta en el fondo de la vivienda y por eso no escuchó nada. Se encontró con la dramática escena cuando entró y encontró a su familia maniatada con precintos.

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La Toyota fue vendida a Lezcano después de varias conversaciones que tuvo con Forno. Se presume que para no levantar sospechas quedó en un predio que era regenteado por el Sindicato de la Fruta, en una chacra ubicada en el límite entre Cipolletti y Fernández Oro, hasta que fue secuestrada por la Policía.

Sánchez también señaló que los robos eran cada vez más violentos. Aseguró que cuando entrevistó a la mujer del abogado le dijo: “Me trataron como un trapo de piso, me arrastraron por toda la casa”.

Los 18 imputados fueron llevados a juicio por estar sospechados de haber conformado una asociación ilícita que se dedicaba a robar en la zona. En mayo de 2016 se realizó un megaoperativo en el que la banda fue desbaratada. Desde entonces las víctimas esperaban que fueran juzgados. El debate seguirá el lunes a las 8.30 con más testimonios.

La camioneta era una Toyota SW4 que había sido robada de la casa de un conocido abogado de Cipolletti en febrero de 2016. El robo fue uno de los más violentos.

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