Incendio en la Patagonia: 1.000 personas siguen sin hogar

Un millar de personas permanecían ayer evacuadas o contenidas en “alojamientos temporarios” debido a la destrucción de sus viviendas durante el incendio que arrasó el martes último varias localidades del noroeste de Chubut.

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El gobernador Mariano Arcioni recorrió ayer la zona siniestrada y se reunió en El Maitén con familiares de Sixto Garcés, el peón rural que murió alcanzado por las llamas y hasta ahora es la única víctima fatal de los incendios.

También permanecen internadas otras tres personas con graves quemaduras, dos de ellas en Esquel y la restante en el hospital de Bariloche.

Arcioni dijo que el gobierno nacional prometió ayuda vía ATN por 200 millones de pesos para la zona afectada. También anunció una recompensa de 3 millones de pesos para quien aporte dato sobre los posibles responsables de iniciar el fuego que arrasó la comarca.

Aunque varios funcionarios dijeron estar seguros de que el origen fue intencional, no hay todavía constancias suficientes en el expediente, que tramita el fiscal con asiento en El Hoyo, Carlos Díaz Meyer.

Además de la ayuda económica, en la región esperan la llegada de los peritos de la policía Federal, que trabajarán en el terreno a partir del lunes en el intento de establecer cómo se originó la devastadora “tormenta de fuego”.

Arcioni precisó que son 290 las casas destruidas por el fuego y unas 1.000 las personas afectadas.

Las campañas de solidaridad para ayudar a las víctimas se multiplicaron en la región y en todo el país. En general la convocatoria inicial fue para reunir ropa, colchones, alimentos no perecederos, agua envasada y alimento para mascotas. Pero ayer algunas voces se alzaron para señalar que esa necesidad estaba medianamente cubierta y lo que más falta hacía eran materiales de construcción.

En relación con el posible origen del incendio y ante algunas acusaciones que señalaron a referentes de organizaciones mapuche, también hubo voces que se alzaron en rechazo.

La Coordinadora del Parlamento Mapuche de Río Negro subrayó que “la policía de Chubut determinó con fotos ,testimonios y filmaciones que el inicio del incendio se produjo por la caída de un transformador de una línea eléctrica y produjo los primeros dos focos”, que se expandieron favorecidos por vientos “de 80 y 100 kilómetros por hora”.

Se quejaron por la virulencia de las acusaciones y las atribuyeron a “personeros del odio contra el pueblo mapuche”. Recordaron además que esa organización denuncia desde hace años “la problemática de las forestales y la instalación del pino en esta región como una actividad rentable para quien lo planta, pero nociva para quien vive en el territorio”. La alta combustibilidad de esa especie habría facilitado la expansión del fuego.

También la werken de la lof Currache de Chubut, Mirta Curruhuinca, dijo en declaraciones a FM Sueños de esta ciudad que no puede culpárselos en forma ligera y sin pruebas por el origen del incendio.

“Es contradictorio que los mapuche quieran prender fuego los bosques -dijo Curruhuinca-. Nosotros recibimos la fuerza y el newen de la naturaleza”.