Paro de colectivos: cuál es la postura de UTA en Neuquén y Río Negro

El próximo miércoles 30 de octubre está programado un paro nacional de transporte que abarcará todo el día y afectará a diversos sectores en el país, como camiones, trenes, subtes, vuelos y barcos. La medida es convocada por la CGT, con la iniciativa de Pablo y Hugo Moyano, contra las políticas de Javier Milei. Qué pasa con los colectivos en Neuquén y Río Negro.

La Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CGT), lanzó una medida de fuerza en respuesta a las políticas del gobierno de Javier Milei, que fueron vistas como un ajuste que perjudica a los trabajadores.

Sin embargo, la Unión Tranviarios Automotor (UTA), gremio que representa a los choferes de colectivos, confirmó que en Neuquén y Río Negro no se sumarán a la protesta el miércoles, manteniendo el servicio normal en estas provincias.

Por qué la UTA decidió no adherir al paro en Neuquén y Río Negro: habrá medidas el jueves 31 de octubre

La reunión, llevada a cabo esta mañana en las oficinas de la Secretaría de Trabajo en la ciudad de Buenos Aires, terminó sin llegar a un acuerdo satisfactorio entre el gremio y los representantes empresariales. En Neuquén y Río Negro, aún no recibieron información sobre la adhesión a la medida nacional: hay dudas respecto a su efectivización en los servicios de la región.

Con esta resolución, la UTA apunta a presionar a las empresas y al gobierno para obtener una respuesta favorable antes de fin de año. Sin embargo, el gremio también tomó una postura distinta frente al paro general convocado por la Mesa Nacional de Transporte, lo que abrió una interna sindical que fue motivo de declaraciones cruzadas entre dirigentes.

Ángel Rubio, secretario general de UTA en Río Negro, volvió a confirmar que las líneas de colectivos de ciudades como el Alto Valle y Bariloche operarán con normalidad este 30 de octubre.

Rubio explicó que la decisión fue adoptada en línea con el Consejo Directivo Nacional, manteniendo la determinación de priorizar las negociaciones salariales en curso antes de adherirse a cualquier medida de fuerza. Aunque no se sabe qué pasará con el servicio del día jueves 31 de octubre.

Gabriel Ceballos, secretario gremial de UTA en Neuquén, coincidió con las declaraciones de Rubio y afirmó que hasta el momento no han recibido ninguna notificación oficial sobre la adhesión de UTA al paro a nivel nacional por lo cual no se sumarán. Aunque luego agregó que estarán expectantes a lo que sucederá en la mesa de paritarias.

«Todavía no nos ha llegado nada del Consejo Directivo Nacional», señaló Ceballos, indicando que en Neuquén, al igual que en Río Negro, el servicio de transporte público de colectivos continuará operando de manera habitual este miércoles y persiste la duda para el jueves.

El paro nacional del transporte en todo el país: las razones y la adhesión de los distintos gremios

La protesta nacional del 30 de octubre fue ratificada en una reunión de la CGT y otros gremios de transporte como el Sindicato de Camioneros, encabezada por Hugo Moyano y su hijo Pablo.

En un comunicado conjunto, los gremios justificaron el paro como una respuesta a las políticas de ajuste que, aseguran, aumentan la pobreza y afectan negativamente a los trabajadores. Entre los reclamos se incluyen los aumentos de tarifas, el retiro de subsidios al transporte y la posible privatización de Aerolíneas Argentinas, una situación que consideran perjudicial tanto para los trabajadores como para los jubilados y las clases más vulnerables.

El paro afectará principalmente a los servicios de transporte público y de carga en toda Argentina, y contará con la adhesión de sindicatos de transporte terrestre, aéreo y marítimo. Entre los gremios que confirmaron su participación se encuentran los de trenes, subtes, aviones, barcos y camiones.

La Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), una de las principales impulsoras de la medida, convocó al cese de actividades como un acto de repudio a las políticas de ajuste del gobierno, destacando que esta acción es una forma de expresar la disconformidad con la situación económica actual.