Los hospitalarios también salieron a las calles en Fernández Oro: «Nos tratan como un descarte»
Los trabajadores del hospital local marcharon por la ciudad, en una convocatoria que se extendió además a los vecinos. Fuerte reclamo por salarios y la falta de insumos médicos.
El conflicto en sistema sanitario de Río Negro sumó un nuevo día con manifestaciones y medidas de fuerza de los trabajadores del sector, en distintos puntos de la provincia. Esta tarde, fue el personal del hospital de Fernández Oro el que salió a las calles para exigir, centralmente, un incremento salarial mayor al ofertado por el Gobierno.
La movilización comenzó a las 18, desde el propio centro de salud orense, convocado por sus trabajadores y con una invitación extensiva al resto de la comunidad. «Salud en lucha» decía uno de los carteles de los manifestantes, que recorrieron la calle Mitre, para luego seguir por Roca y regresar por Cipolletti.
De la actividad, también participaron referentes del gremio Asspur, que lidera el reclamo a nivel provincial, y de ATE, cuyos referentes fueron convocados por el Ejecutivo a una «mesa de diálogo abierta» el próximo lunes.
Romina, trabajadora bioquímica del nosocomio, habló con Diario RÍO NEGRO y aseguró el estado del sector «no da para más». «Nos tratan como un descarte», cuestionó la trabajadora, quien indicó que sus ingresos «están por debajo de la mitad de lo que deberían ser«.
«Un enfermero cobra cerca de $350.000, un médico a tiempo completo $600.000 y un bioquímico cerca de $400.000», relató y aseguró que los sueldos están «estancados» desde hace al menos cuatro meses, cuando la inflación acumulada en el periodo estuvo cerca del 100%.
La falta de recursos, otra preocupación: «Esto tiene impacto en todos»
También apuntó contra el recorte de recursos para la salud, con el consecuente impacto sobre los insumos y los medicamentos. En este punto, señaló que los dichos del gobernador Alberto Weretilneck sobre el envío de partidas no parecer coincidir con la realidad del centro de salud.
Planteó, a modo de ejemplo, que en los depósitos «no hay agujas» ni tampoco insulina o medicamentos para los pacientes oncológicos. «Hasta vienen los pacientes con sus propios inyectables porque acá no hay», relató.
La trabajado hizo también un llamado a al comunidad local para acompañar el reclamo del personal sanitario, ya que «esto tiene impacto en todos».
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