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La CGT nacional criticó “la entrega” de la Delegación Río Negro a la gobernadora Carreras

El titular de la Secretaría de Interior defendió la creación de delegaciones en las zonas Atlántica y Andina.

El abrazo entre la conducción de la CGT Regional Río Negro y la gobernadora, Arabela Carreras, no fue bien recibido en la sede nacional de la central obrera.

El secretario del Interior de la CGT, Horacio Otero, sostuvo que el acto realizado la semana pasada en Allen fue una “entrega”, a cambio de garantizar uno o varios puestos políticos para dirigentes gremiales.

“Cuando alguien te dice ‘voy a entregarle la CGT a la gobernadora’, no está entregando la CGT. Está entregando a cada uno de ustedes, a cambio de tener un puesto político. Eso es lo que han querido hacer en algún momento”, evaluó.

Esa mirada crítica fue expresada días atrás en Viedma, ante todos los referentes y afiliados que participaron del encuentro de normalización de la Delegación Atlántica de la CGT. El video con las declaraciones del dirigente empezó a recorrer rápido toda la provincia y ayer generaba distintas interpretaciones sobre el futuro del sector liderado por el titular de Camioneros, Rubén Belich.

Otero fue enfático en la defensa de las nuevas representaciones de la central obrera -en las zonas Atlántica y Cordillerana- reprochando los intentos por desconocer y anular esas estructuras.

“Querían cerrar esta delegación regional. Para mí esta delegación regional y la Andina son un orgullo. ¿Cómo podés pensar que a 1.000 km de distancia tenés las mismas circunstancias? Si no son ustedes los que interpretan lo que pasa acá, ¿quién lo hace?”, dijo durante el acto realizado en Viedma.

Por eso, ratificó que la pretendida CGT de Río Negro -unificando a todas las regionales- es una estructura que “no existe” y “no se va a crear nunca”.

El lunes pasado, el sector liderado por Rubén Belich y Ovidio Zúñiga, entre otros, recibió en Allen a la gobernadora Carreras, confirmando públicamente su respaldo a la continuidad de Juntos Somos Río Negro en el gobierno provincial pero advirtiendo también la intención de ser “protagonistas” del proceso.

En ese sentido, Otero recordó que cualquier aceptación de un cargo público por parte de un miembro de la CGT debe contar previamente con el aval de la conducción nacional.

“¿Querés irte de diputado? Andá, pero no te vas con la banca mía ni de la CGT. Nadie es dueño de la CGT. Entiéndanlo y repítanlo”, arengó el secretario general del Interior.


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