Viedma: los mejores frutos secos de Valle Inferior tienen una marca, «Allhue»
Segundo stop en el recorrido de la ruta foodie en Viedma. El guía, Juan Manuel Larrieu, periodista.
Por Juan Manuel Larrieu, especial para Yo Como desde Viedma
Foto: Marcelo Ochoa
Seguimos recorriendo la ruta foodie del Valle Inferior de Río Negro.
La primera parada fue conocer “Viejo Puente Molina”, donde Enrique Porro lidera la producción de aceite de oliva.
Ahora nos espera un nuevo emprendimiento.
Vale reiterar que hoy por hoy las nueces, avellanas y almendras son un emblema de los cultivos de este Valle Inferior. Viedma es la capital provincial de los frutos secos. Y su valle lidera en nuestro país la producción.
“Pero esto no siempre fue así, tuvo un comienzo y este fue poco a poco”, nos advierte Bruno De Rosa cuyo emprendimiento lleva el nombre de Allhue, palabra que traduce el esfuerzo y el espíritu de su lucha.
Recurrimos a Bruno De Rosa porque es un productor pionero de los frutos secos en la zona. Es la persona indicada para contarnos cómo fue el comienzo de este cultivo en la región del Valle Inferior.
En pleno trabajo en las instalaciones de Allhue, en Valle Inferior de Río Negro. Foto Marcelo Ochoa
Cuándo y cómo Bruno de Rosa empezó a cultivar frutos secots en Viedma
“Compré una chacra en el año ’80. No quería producir nada que se pusiera en mal estado rápidamente, quería manejar los tiempos, y pensé en frutos secos… En esa época Argentina importaba el 70% de las nueces desde Chile y la poca producción que había era de Catamarca de plantas de semillas, que son de mala calidad”, comparte Bruno de Rosa.
“En 1982 pusimos las primeras plantas, fuimos aprendiendo… equivocándonos todo el tiempo. Y ejercitando también nuestra paciencia ya que la planta tarda entre diez y doce años en entrar a producir, es decir, en dar los primeros frutos”, recuerda el experimentado productor.
Después de esta fase, Bruno comenzó a averiguar sobre la posibilidad de introducir avellanas; importó plantas de España pero no obtuvo el éxito esperado. Mientras tanto, el Idevi hacía plantas y estudiaba la potencialidad de distintas variedades, por lo que decidió comprarles a ellos. El resultado fue el origen de un monte de 11 hectáreas de avellanos.
En el Idevi se producen frutos secos cuya excelente calidad los hace competitivos en el mundo. ¿A qué se debe? La excelencia de las nueces está determinada por las bajas temperaturas. ¿Por qué? Los frutos secos son grandes productores de aceite, casi la mitad de la fruta es aceite. En las zonas frías, la planta para protegerse genera mejor y mayor cantidad de aceite además de brindar una fruta de mejor calidad y más duradera en el tiempo.
Las nueces, avellanas y almendros no solo se consumen en la Argentina sino también se exportan a varios países. Llevan lo mejor de la tierra del Valle Inferior: energía, vitaminas y ácidos grasos esenciales en la dieta saludable. Y también generan trabajo en toda su cadena productiva caracterizada por su esmero y profesionalidad.
La tercera parada en este recorrido por el mapa foodie del Valle Inferior rionegrino será en el emprendimiento Estilo Patagonia, de Eduardo Chico. Los espero, entonces.
A la rica torta de nuez en su versión saludable
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