Tarta de crema pastelera y duraznos… un viaje de ida

Preparación

Arrancamos con la masa y vamos a necesitar un molde de 18 cm de diámetro y 7 cm de alto. En un bol colocar la manteca, debe estar a temperatura ambiente, bien blanda. Agregar el azúcar, la ralladura de limón y con batidora eléctrica batir hasta que se haga una crema pálida. Agregar el huevo y batir hasta integrar. Tamizar la harina, la maicena, la sal y el polvo de hornear y agregar todo junto. Con espátula ir integrando. Vas a notar que es mucha harina, pero te prometo que se absorbe. Apretar sin amasar. Colocar sobre un papel film o bolsa, achatar, tapar y llevar a la heladera al menos 1 hora.

En cuanto al relleno, en un bol colocar todos los ingredientes menos la leche. Mezclar con batidor de alambre, agregar la leche caliente de a poco y mezclar. Calentar a fuego bajo, sin dejar de mezclar hasta espesar. Tarda, tené paciencia. Tapar con un plástico tocando la crema y enfriar completamente.

Precalentar el horno a 170 °C. Forrar la tartera con la masa. Colocar el relleno frío, emparejar y hornear por 50 minutos. La torta no se pincha porque siempre va a salir húmeda. Sale blanda del horno, pero no te preocupes que al enfriar toma más cuerpo. Enfriar bien para desmoldar.

Para la cobertura vamos a picar chiquito las mitades de durazno en almíbar. En una ollita vamos a hacer un almíbar con 6 cucharadas de azúcar, 6 cucharadas de agua. Colocar sobre la tarta bien fría.