Sin cactus ni nada debajo de la cama: 8 pasos para ajustar el feng shui de la casa

El Feng Shui es una técnica oriental que organiza los espacios de forma armoniosa para atraer las buenas energías. La técnica puede ayudar a traer suerte y fluidez al hogar, manteniendo a los residentes con buena salud y felicidad. Sus primeros registros se remontan a más de 4.000 años y el nombre tiene orígenes chinos y significa «viento» y «agua».

La práctica es una verdadera terapia casera. Para empezar, nada de objetos debajo de la cama. Los calendarios antiguos también pueden retrasar la vida.

Cómo equilibrar el hogar con el Feng Shui

1 – Sacá los objetos debajo de la cama:

¿Has notado que los orientales colocan sus camas muy cerca del suelo? Esto no es una moda pasajera cualquiera. Es una forma que encontraron de permanecer más cerca del suelo para absorber toda la energía de la tierra, que, para ellos, es sagrada. Mientras que nosotros a veces guardamos cosas debajo de la cama.

Entonces, el primer paso del Feng Shui es hacer una limpieza general debajo de la cama y trasladar esos objetos a un armario. ¡Entonces cama baúl, de ninguna manera!

2 – No poner espejos que reflejen la cama:

Hablando de la habitación, un consejo clásico en el Feng Shui es no tener espejos en la pieza colocados de tal manera que reflejen a la persona que está acostada en la cama. Simplemente colóquelo en un lugar donde no pueda verse dentro.

Esto se debe a que el espejo genera una aceleración de la energía y puede provocar un aumento de la presión arterial y del ritmo cardíaco. Y esto acaba haciendo que el sueño sea intranquilo y poco rentable. Para armarios que tienen puertas de espejo, vale la pena hacer la prueba de tapar la puerta y ver si el sueño se vuelve más fluido.

3 – Sin macetas con flores muertas:

El objetivo de tener plantas y flores en el interior es aportar armonía y luminosidad al ambiente. Son un filtro energético, que permite que la prosperidad entre en casa. Cultivar una planta que ya está muerta acaba por quitarle lo bueno a tu hogar.

¿Qué tal si abonás la tierra, cortás las ramas secas y sembrás una nueva planta? Si tenés dificultades para brindar cuidados dedicados, elegí especies que no necesiten agua todos los días.

4 – No tener cactus dentro de la casa:

Cuando hablamos de plantas que no necesitan agua todos los días, ¿qué nos viene a la cabeza? ¡Los cactus! Sin embargo, no son una buena compañía para tenerlos en el interior de tu casa. Además de contener espinas, que aportan la energía de eliminación, retienen mucha agua. Y cualquier cosa que contenga mucha agua acaba absorbiendo también muchas emociones.

¡Pero calma! No es necesario deshacerse de ese cactus en maceta que te encanta y has tenido durante años. Solo hay que dejarlo afuera, en balcones, patios o soportes de ventanas.

5 – Acabar con los objetos rotos:

Tener un arsenal de objetos rotos o estropeados tampoco es una buena idea si querés adoptar el Feng Shui, y además ocupa espacio. La recomendación es hacer una limpieza general y no guardar esos elementos rotos que ya no sirven.

Aprovechá la oportunidad para practicar el desapego y evitá ser un acaparador. Las cosas rotas deben tirarse a la basura. Deshacerse de todo esto evita problemas emocionales e indecisiones, permitiendo que la energía fluya sin interrupciones.

6 – Cuidado con los objetos pinchudos:

El Feng Shui no recomienda dejar objetos afilados como cuchillos, tijeras y herramientas expuestos. Esto se debe a que estos elementos se encargarían de cortar toda la energía que circula donde se encuentran, afectando la armonía del lugar y de quienes allí habitan.

Por exaltar la agresión, pueden hacer que las relaciones entre los residentes reflejen esta energía, generando peleas, discusiones y falta de afecto entre las partes.

7 – Basura en la basura:

Si tenés un altillo, habitación para guardar trastes o algo por el estilo, cuidado. Es muy fácil llenarlos con todo aquello que ya no utilizamos. Resulta que con el tiempo, todos estos objetos acaban convirtiéndose en auténticos escombros llenos de polvo.

Y es que, para el Feng Shui, no hay nada más peligroso para la fluidez de la energía de tu hogar que este tipo de acumulación. Presta también atención a las cajas de cartón vacías, plásticos con burbujas desinfladas, revistas viejas, restos de suelo y azulejos viejos. ¿No lo vas a utilizar? ¡Despídelos sin piedad!

8 – Nada de relojes parados ni almanaques viejos:

Mantener relojes rotos colgados en la pared no es un buen negocio. Lo mismo ocurre con los calendarios antiguos, que te atrapan en planes olvidados e incumplidos. Hacer circular la energía en el momento presente es fundamental en el Feng Shui para mantener armonizado el entorno y tu vida diaria.

Otro consejo es mantenerlos siempre a tiempo. Nada de adelantar el reloj para no retrasar las citas, ¿ok? Alineáte con el tiempo de los días.

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