Los sobrinos de María Kodama fueron a la Justicia en reclamo del legado de Borges
En las últimas horas, se conoció que la viuda del escritor no había dejado testamento escrito. Se trata de los cinco hijos de Jorge Kodama, el fallecido hermano de la escritora.
Los sobrinos de María Kodama se presentaron ante la Justicia para ser reconocidos como únicos herederos del legado de Jorge Luis Borges, según trascendió en las últimas horas. El reclamo surge luego de que se informara que la mujer, albacea y viuda del escritor, no había dejado testamento sobre el patrimonio a heredar.
«Me alegra y alivia mi espíritu. Esto abre una nueva etapa en el expediente sucesorio», sostuvo Federico Soto, abogado de la traductora, docente y escritora, quién además aseguró que se siente «aliviado» por la solicitud realizada por los cinco familiares de Kodama, en el juzgado civil N°94.
Después de la muerte de la autora a fines del mes pasado, se conoció que, hasta ese momento, no se había encontrado ningún testamento que aclarará quien sería el responsable de los derechos de la obra de Borges.
Sin embargo, en menos de 24 horas, Mariana del Socorro, Martín Nicolás, María Victoria, Matías y María Belén Kodama, sobrinos de quién fuera albacea del legendario escritor, se acercaron a la Justicia para reclamar que «se dicte declaratoria de herederos».
En la presentación pidieron realizar un inventario provisional y secuestrar bienes muebles como obras literarias, premios, condecoraciones, manuscritos, fotos, material periodístico y títulos de propiedad de valor literario e histórico que deba salvaguardarse.
El abogado Soto explicó que «los sobrinos son los responsables de pedir un administrador y la protección de esos bienes» y aclaró que, aunque sería una «decisión práctica» que los demandantes se comunicaran con él, no tienen la obligación de hacerlo por ley.
La posibilidad de herencia al extranjero, descartada
Tiempo atrás, Kodama anticipó que su intención era entregar el legado del autor literario a dos universidades extranjeras, posiblemente de Tokio, en Japón, donde investigadores trabajan fuertemente sobre la obra del escritor, o las estadounidenses de Texas o Harvard.
En ese contexto, durante una conferencia de prensa realizada el pasado lunes, Soto confirmó que su representada no había dejado ningún testamento.
«Su escribana de confianza no tiene testamento. Nadie de círculo cercano entre quienes consultamos conoce el documento. Si al momento de entrar a su casa se encuentra un testamento, se tomará ese, pero las posibilidades son bajísimas”, aclaró finalmente el abogado.
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