Vaca Muerta en Mendoza: YPF obtuvo resultados positivos y dobla la apuesta con la exploración

La empresa de mayoría estatal tiene prevista una segunda etapa de exploración de Vaca Muerta en Mendoza, con inversiones que rondarán los US$30 millones. El objetivo es conocer más allá de la zona caliente de la formación.

YPF presentó los resultados de las exploraciones de la formación Vaca Muerta en las áreas Paso Bardas Norte y CN-VII. Señaló que fueron prolíferas, por lo que solicitará la extensión de los permisos exploratorios, para realizar una segunda etapa, en la que tiene previsto invertir unos US$ 30 millones. El objetivo es obtener resultados más allá de la zona caliente de la formación.

La empresa terminó el proceso de fractura en ambos pozos ubicados en Malargüe, en los que invirtieron más de 17 millones de dólares como parte de la exploración del no convencional. El hallazgo fue «auspicioso», lo que llevó a YPF a pensar en más estrategias de trabajo con inversiones hasta 2025.

Se perforaron un pozo vertical y dos pozos horizontales de 1.074 y 1.059 metros de rama cada uno, en Paso Bardas Norte, donde tiene concesión de explotación, y CN-VII A, donde cuenta con el permiso exploratorio. Tras los resultados, hay perspectivas de nuevos pozos.

En Paso Bardas Norte se realizaron 12 etapas de fracturas. Se inició el ensayo el 18 de febrero de 2024, y mostró desde sus inicios interesantes porcentajes de petróleo de densidad 38°API. Según detalló la empresa, alcanzó con orificios superiores caudales cercanos a 100 m3/d de bruta. Ahora ensaya con 69 m3/d de bruta y 51% de petróleo, con 35 m3/d.

En Aguada Negra (CN-VII) se realizaron 13 etapas de fracturas hidráulicas. Se inició el ensayo y desde entonces «mostró interesantes porcentajes de petróleo de 43°API. Actualmente, produce con una bruta de 84 m3/d y 48% de petróleo (41 m3/d), con un GOR (relación gas/petróleo) de 1.000 m3/d», informaron desde el Gobierno provincial.

El petróleo hallado ronda los 40° API, lo que lo caracteriza como crudo liviano. Foto: gentileza.

Los ensayos de los pozos no convencionales fueron extendidos en el tiempo mínimo necesario para poder evaluar en detalle los niveles de reservorio. Ahora, continuarán con el testeo de su comportamiento. Comenzaron el 18 de febrero de 2024 y se finalizaron el 18 de mayo. Luego se desarrollarán las instalaciones de producción apropiadas.

Se trata de una noticia muy importante para la industria energética mendocina, ya que estos resultados posicionan nuevamente a Malargüe en el centro de la visión y el futuro energético”, señaló el subsecretario de Energía y Minería del Ministerio de Energía y Ambiente, Manuel Sánchez Bandini.

“Esto abre un nuevo horizonte de incorporación de reservas para Mendoza en materia de hidrocarburos, en un momento en el que hay una visión industrializadora para el Sur mendocino, con el Polo Logístico e Industrial Pata Mora, que prestará servicio a las empresas y servicios que operan en la zona y a todo el desarrollo minero de Malargüe Distrito Minero Occidental”, amplió.

“Junto con las 12 áreas que tenemos en licitación en la provincia, con un nuevo modelo de licitación continua, la reactivación del área petrolera más alta del país, Vega Grande, por parte de Emesa, y la cesión de derechos de esta área agregamos dinamismo al sector energético, por el que trabajamos en materia de hidrocarburos”, aseguró.


Vaca Muerta en Mendoza: los próximos objetivos de YPF


YPF presentó la solicitud para pasar a un segundo período exploratorio en el permiso sobre el área de reserva de CN-VII A. La empresa proyecta perforar un nuevo pad (locación de producción) de dos pozos horizontales a mayor profundidad, lo que permitiría alcanzar mayor presión de reservorio y una posible mejor productividad.

En caso de encontrar una productividad y acumulada por pozo tal que el proyecto fuera rentable, abriría para las áreas CN-VII A y Paso Bardas Norte un desarrollo de alrededor de 212 pozos horizontales (orgánico inferior y orgánico superior) navegando en dos niveles productivos, en un área total de 102 kilómetros cuadrados.

“La llamada lengua mendocina de Vaca Muerta no es idéntica a la de Neuquén, pero tiene excelentes prospectos de exploración y los resultados validan el modelo geológico. El paso siguiente es continuar con más inversiones, bajar el riesgo geológico y avanzar en el desarrollo de nuestro reservorio no convencional”, señaló el subsecretario.

Existe la posibilidad de desarrollar un tercer nivel de navegación, que sumaría 122 pozos de desarrollo. «El plan exploratorio de los bloques contempla realizar, en 2025, un piloto vertical a partir del cual se definirán dos niveles a navegar y con dos ramas horizontales de 2.500 metros», expresaron desde Provincia.


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