Los 1.200 MW en capacidad de transporte que apunta a liberar Nación
La secretaría de Energía oficializó un esquema para la rescisión voluntaria de proyectos renovables que están frenados. Buscan desbloquear potencia en las redes para adjudicar nuevos desarrollos. Una medida esperada por el sector.
Este año se sumará, por lo menos, cinco veces más la potencia instalada de 2022. (Foto: archivo Florencia Salto)
La resolución 1.260 que publicó el gobierno nacional recientemente con la que busca desbloquear potencia reservada en las redes de transporte eléctrico podría liberar más de 1.200 MW de capacidad en el corto plazo. Se trata de una de las políticas más esperadas por la industria renovable y que fue destacada por cámaras del sector.
Tras varios meses de espera, la secretaría de Energía de Nación estableció una serie de mecanismos para resolver la situación de todos los contratos de energías renovables adjudicados en las rondas 1; 1.5; 2 y 3 del programa RenovAr y por la resolución 202/2016 que quedaron truncos por el descalabro macroeconómico que se inició en 2018.
Según datos de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) hay más de 40 proyectos por unos 1.200 MW de potencia que no fueron habilitados y están en causal de recisión. El dato más preocupante para la industria es que de esa potencia total, hay un 45% que no registra ningún tipo de avance en su construcción, un porcentaje que equivale a unos casi 550 MW.
En números
- 45%
- de los proyectos renovables que están en condiciones de rescindir los contratos no realizó ningún avance de la obra.
Y menos de un 20% (casi unos 220 MW) de esa potencia total tiene algún avance en las construcciones de los parques. El resto está frenado en procesos intermedios sin mayores señales de reactivación.
“La Resolución de la Secretaría de Energía da respuesta a un reclamo extendido en el sector permitiendo dar un impulso más para lograr la meta de llegar al 20% de capacidad instalada eléctrica a partir de fuentes renovables para el 2025”, señalaron desde la Cámara Eólica Argentina (CEA) en una publicación reciente.
Recisión voluntaria
Según estipularon desde la secretaría de Energía, para aquellos proyectos que no alcanzaron a cumplir con los plazos previstos, se prevé su salida voluntaria a través de un único pago de 17.500 dólares por MW para eólicos y solares, y de 12.500 dólares por MW para biogás, biogás de relleno sanitario, biomasa y pequeños aprovechamientos hidroeléctricos.
En números
- 17.500
- dólares por MW es lo que deben pagar quienes cancelen contratos eólicos o solares y unos US$ 12.500 por MW para el resto de las tecnologías.
En paralelo, también previeron nuevas condiciones en los términos originales del contrato, en lo que respecta a precio, duración y garantía de cumplimiento, para aquellos que opten por prorrogar los plazos de ejecución por un año. Además, se incorpora la exigencia de acreditar un mínimo del 30% de Componente Nacional Declarado (CND) en las instalaciones electromecánicas del proyecto, o el incremento de un mínimo del 5%, si el proyecto hubiese comprometido un porcentaje inferior al 30%.
Dónde están los megas entrampados
La mayoría de los megas que están en causal de recesión ocupan capacidad de transporte en las regiones de Cuyo, NOA y Comahue, mientras que, en menor escala, están repartidos en Centro y la Costa. Luego hay una potencia residual en las regiones del NEA, Patagonia, Litoral y Buenos Aires que podría servir para proyecto de pequeña escala o de generación distribuida.
En detalle, casi el 40% está en la región de Cuyo, el 24% en el NOA y el 15% en Comahue. El resto se divide en las demás regiones.
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