Ni Bolivia, ni el Gasoducto Norte: el gas viene de Chile y una maniobra similar ya había sido denunciada
El fluido se utiliza para cubrir la demanda de las provincias del norte. Se trata de GNL importado por el país trasandino y regasificado.
Por la reversión del gasoducto se dejó de importar gas a Bolivia. Foto: Gentileza.
Este mes Argentina dejó de importar gas desde Bolivia. Hasta tanto se ponga en funcionamiento la reversión del Gasoducto Norte, que transportará la producción nacional de Vaca Muerta, se está importando gas desde Chile, un país que carece de ese tipo de producción. Una maniobra por la que el exministro Juan José Aranguren fue denunciado.
En junio, se selló un acuerdo desde Enarsa para importar gas desde el país trasandino. Es a través del gasoducto Norandino, que vincula Chile con Salta.
El contrato de importación entre Enarsa y las firmas chilenas Engie Energía Chile y ENAP Refinerías comprende un volumen total de 128,5 millones de metros cúbicos de gas natural, con lo cual en los niveles actuales de despacho se trata de un plazo de entre dos y dos meses y medio.
Chile no tiene producción propia de gas natural. Importa gas natural licuado (GNL) que llega a la terminal portuaria de Mejillones. De allí se lo regasifica y se inyecta en las redes de ese país. Un proceso que encarece el valor al cual finalmente llega a Salta.
Una denuncia archivada sobre el precio del gas
En 2020, Federico Bernal, quien fuera interventor del Enargas en ese entonces presentó una denuncia penal contra algunos funcionarios del Gobierno de Mauricio Macri, entre ellos Juan José Aranguren, ex ministro de Energía y Minería de la Nación. La acusación fue por «incumplimiento de los deberes de funcionarios y negociaciones incompatibles con la función pública”.
En la denuncia, que abarcó varios puntos, se incluyó la importación de gas desde Chile, a través del mismo gasoducto que se está utilizando en la actualidad.
El foco de la denuncia era el alto precio que se había pactado por ese gas, en contraposición con el valor del gas natural proveniente de Bolivia, señalándose además una posible maniobra para beneficiar a una empresa para la que el exministro había trabajado.
“No existen elementos de convicción suficiente como para establecer una plataforma fáctica que permita dirigir una imputación concreta”, determinó sobre la denuncia el Juzgado Criminal y Correccional Federal Nº12 de la ciudad de Buenos Aires.
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