Minería, transición energética y RIGI: cómo puede impactar la normativa en proyectos locales

La demanda social de energías limpias es un hecho y el futuro de las explotaciones mineras representa uno de sus principales focos de atención para una transición energética responsable y productiva.

Por Lucía Mejuto (*)

Argentina tiene un gran potencial para la producción de energía verde. Desde Buenos Aires hacia el Sur del país, se destacan las condiciones de desarrollo para la energía eólica. También, en el Norte, la energía fotovoltaica tiene nutridas posibilidades. De este modo, en un marco económico y político local adecuado, se proyecta la ampliación de la generación renovable en la próxima década.

Proyectos mineros como Josemaría y Filo Del Sol en San Juan y Taca Taca, en la puna salteña, están expectantes por la puesta en marcha del Régimen de Incentivos para las Grandes Inversiones (RIGI). Dicha normativa aplica a las grandes inversiones en proyectos de energía, petróleo y gas.

Se esperan movimientos en las economías regionales involucradas en la producción de energía limpia. Un contexto favorable a la producción de energía implica la solicitud de incentivos por parte de las provincias. Es fundamental una legislación alineada que establezca incentivos fiscales para energías renovables, y metas de reducción de carbono.

A su vez, los gobiernos pueden ofrecer subsidios y otros incentivos financieros a empresas y particulares para promover la inversión en tecnologías limpias, de modo que sean más competitivas frente a las energías fósiles.

Otro punto importante es la construcción de infraestructura adecuada, como redes eléctricas inteligentes y sistemas de almacenamiento de energía, es esencial para integrar las energías renovables de manera eficiente en el sistema energético.

Y si ampliamos la mirada con perspectiva regional, podemos asegurar que el interés por concretar correcta y productivamente los cambios que llevan a una transición energética responsable se proyecta en toda América Latina. El 35% de los latinos reconoce que la energía sostenible es una cuestión importante, pero que existen prioridades más importantes que gestionar.

Estos datos devienen del Informe de Transición Energética en América Latina que hemos realizado desde Aggreko. Su desglose indica que, además, el 30% de los encuestados indicó que la acción de los gobiernos es escasa a la hora de introducir energías sostenibles.

Por su parte, el 24% reconoce esta situación como prioridad para los gobiernos y considera que existen muchas soluciones y planes sostenibles. Esto subraya la inmediata necesidad de una mayor claridad en las políticas estatales y de un compromiso certero para impulsar la transición hacia una matriz energética más sostenible en toda la región.

(*) Business Development Manager de Aggreko, líder mundial en el desarrollo de soluciones energéticas.


Adherido a los criterios de
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales
<span>Adherido a los criterios de <br><strong>Journalism Trust Initiative</strong></span>

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios

Registrate gratis

Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento

Suscribite desde $999 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora