Los combustibles subieron más que la inflación y podrían seguir los aumentos

Desde hoy pedir «tanque lleno» al llegar a una estación de servicio no será tan fácil, y es que no solo se trata de cargas de más de 30.000 pesos -para el caso de un auto naftero- sino que luego de varios años de precios atrasados, el incremento que tuvieron los combustibles en el 2023 superó a la inflación acumulada y tan solo en los últimos 25 días suma aumentos por más del 108%.

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Aunque hoy cueste creerlo, el 2023 inició con el precio de la nafta súper en 131,5 pesos, la premium a 168, el gasoil grado 2 a 173,6 y el gasoil premium a 232,2 pesos, en el caso de YPF en Neuquén.

Luego de que en la mayor parte del año se dieran aumentos acordados con Nación del orden del 5% mensual, e incluso un período de congelamiento de 75 días, desde noviembre los aumentos se dispararon y llevaron a que de punta a punta del 2023 el incremento promedio de los surtidores sea de nada menos que el 268% para el caso de Neuquén.

Esta variación refleja que los aumentos estuvieron muy por encima de la inflación registrada en el período que entre enero y noviembre sumó un 160,9% medida por el IPC.

Pero además, si se toma una proyección del 25 al 30% de inflación para diciembre -se conocerá la semana que viene- haría quedar el año en torno al 175%, casi 100 puntos menos que lo registrado en los combustibles. Y eso sin contar el aumento aplicado en los primeros minutos de hoy.

Esta disparada de los precios en surtidor, acelerada en el último mes, se debe en parte al atraso desde el que partieron los valores, que incluso llevaron a YPF a registrar pérdidas en su último balance a pesar de tener un nivel de ventas de combustibles récord.

Hace menos de un mes, el 8 de diciembre, justo en la víspera del cambio de gobierno, las refinerías aplicaron un aumento promedio del 20% en los surtidores. Cinco días más tarde, ya en la gestión de Javier Milei aprovecharon la postura del nuevo gobierno de no intervenir en los precios y volvieron a incrementar sus precios de venta, pero esta vez fue en un 37%.

Y desde la medianoche de hoy se aplica el segundo aumento del gobierno de Milei, del 27%, que está haciendo que en menos de un mes el precio de los surtidores se haya incrementado un 108% en total, y con un horizonte por delante en el que es posible que se den nuevas subas en las siguientes semanas.

Si volvemos a comparar los precios vigentes hoy con los de enero del año pasado, el golpe es claramente mucho mayor. En el caso de la nafta súper que hoy se paga a 665 pesos en el caso de las estaciones de servicio Puma, el aumento es del 405% y del 394% si tomamos la nafta premium que se vende a 831 pesos.

En el gasoil las subas son un poco menores, del 400% clavado para el tipo 2 que se vende a 869 pesos el litro, y del 323% para el gasoil premium que en Neuquén se vende a 984 pesos pero que en General Roca llega a los 1010 en algunas estaciones.

Habrá más aumentos

Pero como se mencionó, el escenario del sector marca que es de esperarse nuevos incrementos, no de inmediato, pero sí el mes que viene o en cuestión de semanas.

Esto se debe a que desde el sector de las refinerías, la meta es llevar el precio de los combustibles a la paridad de importación, un valor que llevaría el litro de nafta súper hasta 1 dólar o 1,20 dólares. Pero en ese proceso por el que aún restaría entre un 20 y un 30% por subir, se suma otro factor como es el progresivo aumento del dólar oficial.

El efecto de la disparada del dólar es clave en el precio de los combustibles, ya que la suba de la moneda verde oficial en el último año llegó al 348%, al pasar de 185 pesos en enero de 2023 a los 830 pesos de hoy, licuando de esta forma gran parte del incremento en pesos registrado en los combustibles.

Pero además, el gobierno apuesta a un sistema de «crawling peg» que ya llevó el dólar oficial de 800 a 830 pesos en menos de un mes, haciendo que cada vez ese equilibrio de un litro a un dólar se corra más al expresarlo en pesos.

Con los actuales valores, el litro de nafta súper podría ir desde los 830 a los 990 pesos, un salto que sin dudas tendrá un efecto contractivo en las ventas del sector que el año pasado marcaron el récord histórico de consumo.