La CNEA ya cuenta con un protocolo de intervención por violencia de género
Alcanza al personal de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y a las empresas tercerizadas que presten servicio o tengan convenios. Se aplicará en todas las dependencias y anexos de la comisión.
El protocolo contempla a los trabajadores en todas las dependencias incluyendo los de empresas tercerizadas. Foto: gentileza.
La Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) puso en marcha su Protocolo de Intervención Institucional ante casos de violencia por motivos de género y/u orientación sexual en todas sus dependencias. Comprende al personal de CNEA como así también de instituciones y empresas tercerizadas que presten servicio al organismo.
En detalle, el documento establece procedimientos de actuación ante casos de violencia de género, acoso sexual y discriminación basados en motivos de género, orientación sexual, identidad de género o expresión de género.
Fue aprobado a través de la Resolución 2023-269-APN-CNEA#MEC, con la firma de la presidenta del organismo, Adriana Serquis. «Este es el resultado de un largo recorrido de varios colectivos de mujeres de nuestra institución, que desde hace bastantes años vienen analizando diferentes casos de protocolos de actuación frente a casos de violencia de género«, subrayó en diálogo con Energía On.
La denuncia será recibida por el/la representante de la Comisión de Igualdad de Oportunidades y de Trato (CIOT-CNEA) quien elevará la misma a CIOT Central. El protocolo alcanza a todas las personas que se encuentren atravesando, presencien o tengan conocimiento directo de alguna situación de violencia por motivos de género y/u orientación sexual.
«Si la última (CIOT Central) determina que la denuncia corresponde a un hecho de violencia, requerirá a CNEA que realice la investigación sumaria correspondiente y enviará al domicilio de la parte denunciante una notificación con el número de expediente para realizar el seguimiento», indica el escrito.
El objeto del protocolo es “promover un ambiente libre de violencia, acoso sexual y discriminación hacia las mujeres y disidencias sexo-genéricas que tengan una relación laboral y/o educativa con la CNEA, en cualquiera de sus dependencias y anexos, promoviendo la igualdad de oportunidades y trato”.
Contempla todas las actividades que «de manera directa o indirecta, dentro o fuera de cualquier emplazamiento físico de la CNEA, a través de medios telefónicos, virtuales o de otro tipo, estén contextualizadas en el marco de las relaciones laborales y/o educativas«.
La persona en situación de violencia por motivos de género y/u orientación sexual que realice consulta y/o denuncia, podrá solicitar la modificación del lugar y/u horario de prestación de servicio, «a fin de resguardar su integridad física y/o psicológica y/o la de su círculo de confianza«, detalla.
«A la persona que se encuentra atravesando una situación de violencia por motivos de género, le asiste el derecho al reconocimiento de la Licencia aprobada mediante Resolución del Secretario de Empleo Público N° 24/19″, se expresa.
Todo hecho de violencia y acoso por motivos de género implica una violación al marco normativo establecido que «podría dar lugar a una instrucción sumaria y en caso de corresponder, derivará en sanción proporcionales a la falta cometida, de acuerdo a lo establecido en el Régimen Disciplinario para el personal de la CNEA, sin perjuicio de las responsabilidades civiles y/o penales fijadas por las leyes».
Protocolo de intervención por violencia de género: las particularidades de la CNEA
El protocolo contempla las particularidades que tiene la CNEA. Entre ellas, recordó que dentro de la institución «tenemos personas que no dependen laboralmente de la comisión, sino, por ejemplo, de Conicet, o de los institutos, que son hechos en convenio como el instituto Sábato y el Dan Beninson con la universidad de San Martín, o el Balseiro con la universidad Nacional de Cuyo».
A ello se le suman las empresas tercerizadas. «Una de las principales preocupaciones es que es difícil contemplar ese tipo de situaciones cruzadas«, agregó. Con esta observación, establecieron acuerdos con cada una de las instituciones que «estarán obligadas a adherir a este protocolo«, indicó Serquis.
«Apuntamos a que en ese acompañamiento no haya una revictimización y que podamos, en el caso que sea necesario, presentar y actuar. El protocolo no puede estar por encima del de la administración pública nacional, pero sí podemos darle características propias», comentó la referente.
Por último, se creará una Comisión de Género conformada por integrantes designados por la CNEA, los gremios del sector (ATE, UPCN, Apcnea, Atcnea), la CIOT, el Equipo de Orientación y grupos de mujeres y disidencias. «Su función será contribuir a la implementación del protocolo y de políticas de género en el organismo de una manera transversal«, expresaron desde el gobierno nacional.
«La idea es que se trabaje desde el diagnóstico, la prevención y la capacitación. La intención es no tener que resolver una vez que las situaciones ocurren, sino poder preverlos, y poder empezar a generar una concientización de lo que significa la inclusión de mujeres y diversidades en los ámbitos de trabajo en la CNEA», destacó Serquis.
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