Hidroeléctricas: la nueva prórroga no despejó las dudas sobre la futura licitación
Nación fijó que en 180 días deberá relicitar las concesiones. Desde las empresas se puso en dudas que el plazo sea suficiente.
Nación prorrogó otro año las concesiones hidroeléctricas, pero ya hay dudas si se llegará a tiempo con la licitación.
El dicho reza que como muestra basta un botón. Y la incertidumbre de las concesionarias de las centrales hidroeléctricas del Comahue tiene hoy toda una mercería como para poner en dudas que en febrero se relicite finalmente la concesión de los complejos.
Las centrales hidroeléctricas del Comahue se privatizaron en 1993 por un plazo de 30 años y con la posibilidad de sumar una extensión de un año más para su relicitación. El gobierno no solo hizo uso de esos 365 días extra que daban los contratos, sino incluso de las primeras dos horas del siguiente día hábil para publicar ayer el decreto 718/24 que, con la firma del presidente Javier Milei, sumó otro año más al incierto futuro de las hidroeléctricas, aunque ahora con la promesa de volver a licitarlas antes de febrero.
El Decreto 718/24 que también lleva la firma del Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y del ministro de Economía, Luis Caputo, tiene solo diez páginas y no brinda demasiadas precisiones sobre lo que sucederá con las cinco represas de los ríos Neuquén y Limay.
Sí marca lo que en síntesis es la sexta prórroga consecutiva de las concesiones de las represas El Chocón – Arroyito, en manos de la italiana Enel; Alicurá que es administrada por la norteamericana AES Argentina; Cerros Colorados sobre el río Neuquén que Aconcagua Energía compró a Orazul el año pasado; y Piedra del Águila, en manos de Central Puerto y la única que no vencía este domingo sino el 29 de diciembre.
Las firmas operan estas instalaciones hace 31 años y, de solicitarlo a la secretaría de Energía a través de una Carta de Adhesión, podrán mantenerla por un año más. De no adherirse, los concesionarios están obligados a continuar con la generación de energía eléctrica por un plazo no menor a 45 días hábiles.
Un detalle no menor, es que entre los compromisos para las empresas que continúen con la operación de las represas, se expuso que deberán abonar el esquema de regalías para las provincias de Río Negro y del Neuquén que se deberá acordar entre la Secretaría de Energía del Ministerio de Economía y las provincias.
Este punto es lo que se espera sea debatido en la reunión que mantendrán Río Negro y Neuquén con el secretario de Energía de la Nación, Eduardo Rodríguez Chirillo.
Es que, como herramienta de presión, mientras las provincias reclamaban tener participación en el manejo de las concesiones, se aprobaron leyes en ambas legislaturas para proceder al cobro de un canon por el uso del agua que hacen las centrales hidroeléctricas.
En la práctica, el cobro de un canon de ese tipo es facultad de las provincias -como Neuquén que lo cobra a la industria petrolera- y podría tener un impacto económico mucho mayor que las regalías que, en el actual esquema legal, son fijadas por Nación y habitualmente se calculan sobre valores que no se actualizan por la inflación.
Antes del 10 de febrero se deberá llamar a licitación
El decreto establece que dentro de los próximos 180 días, es decir, antes del 10 de febrero, Nación llamará a un Concurso Internacional para la venta del paquete accionario mayorista de cada una de las razones sociales que creó en junio bajo el mando de Nación, para su administración.
El paquete accionario de estas sociedades se divide entre las estatales Enarsa y NASA (Nucleoeléctrica Argentina) que deben transferir, dentro de los primeros seis meses, las acciones que corresponden a esas empresas a la Secretaría de Energía.
Así, harán la transferencia de los paquetes accionarios al sector privado y con ello su concesión. Un aspecto que no implica la venta de los activos en sí, que seguirán siendo del Estado.
En caso de declararse fracasado el concurso, la titularidad del paquete mayoritario de acciones permanecerá en poder del Estado Nacional. Otro punto para nada menor para los objetivos que tenían las provincias de Río Negro y Neuquén de ser parte del poder concedente, pero que ahora queda fijado de antemano por el decreto firmado por Milei, Francos y Caputo, que no se les dará lugar a tal aspiración.
Cautela en las empresas
Martín Genesio, el Presidente y CEO de AES Argentina Generación, la concesionaria de la central Alicurá, destacó que “vamos a seguir operando la central de manera profesional, tal como lo hicimos los últimos 30 años, hasta que el gobierno pueda concretar la licitación de la nueva concesión”.
El titular de la firma norteamericana, señaló que “creemos que la decisión de que sean las empresas privadas, con probada experiencia en la operación de este tipo de activos tan importantes, las que operen estas centrales en el futuro, es un paso en la dirección correcta”.
Desde otras firmas, en tanto, plantearon que no todo es positivo, y que ven con preocupación que en el artículo 4 del decreto de ayer se fijó que no podrán objetar a Nación las modificaciones que hagan en torno a las regalías.
“Eso puede ser un problema serio, porque ya venimos de años de tarifas atrasadas, porque las fija cuándo y cómo quiere la Secretaría de Energía sin seguir ningún parámetro como la inflación”, plantearon desde una de las empresas. Y enfatizaron que “ahora es posible que suban las regalías sin autorizarnos a trasladarlo a la tarifa y sin darnos el derecho a poder reclamar”.
Las empresas plantearon sus dudas sobre el llamado a licitación
Las actuales concesionarias de las centrales hidroeléctricas consultadas por este medio reconocieron como un punto positivo la extensión de las concesiones fijada ayer por decreto, pero advirtieron que la norma tampoco les da seguridad de que se llegará a tiempo con el llamado a licitación.
“Hacer todo un nuevo marco normativo como el que requiere un llamado a licitación internacional no es algo fácil de hacer, y el plazo que fijaron de seis meses es bastante ajustado”, indicaron desde una de las concesionarias.
Y sumaron que “vemos al gobierno como que está convencido de hacer esto pero también hay algunos indicios que generan incertidumbre”.
Entre esos indicios, uno se desprende del mismo decreto publicado ayer, y es que recién ahora la estatal Enarsa le deberá pasar la información que durante los dos últimos años recolectó sobre las represas a la Subsecretaría de Energía para su análisis de cara a la licitación. Un paso que podría ser extenso.
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