Dos gigantes petroleros disputan la participación en un bloque petrolero de Guyana
Exxon y Chevron compiten por una participación en el enorme yacimiento petrolífero de Stabroek, en Guyana. Se estima que contiene al menos 11.000 millones de barriles de petróleo.
La participación en el bloque en disputa es del 30%. Foto: gentileza.
Exxon Mobil anunció el lunes que podría adelantarse a la decisión de Chevron de adquirir una participación del 30% en un gigantesco bloque petrolero de Guyana, la principal razón de su acuerdo para Hess Corp. Exxon tiene derecho de preferencia en cualquier venta del bloque Stabroek, un campo gigante frente a la costa de Guyana que contiene al menos 11.000 millones de barriles de petróleo.
La disputa entre los principales productores de petróleo de Estados Unidos podría poner fin al acuerdo de 53.000 millones de dólares de Chevron para adquirir Hess, según advirtió la estadounidense en un documento de valores. Si el acuerdo fracasa, Hess podría ser responsable de una tarifa de ruptura de 1.700 millones de dólares.
Las acciones de Hess cayeron más del 3% en las últimas operaciones. Chevron cayó casi un 1%. Exxon dijo en un comunicado que quiere asegurarse de «preservar nuestro derecho a realizar el valor significativo que hemos creado y al que tenemos derecho en el activo de Guyana».
Agregó que está «trabajando estrechamente con el gobierno de Guyana para garantizar sus derechos y privilegios. Hay que suponer que Chevron tomó una decisión comercial de la que Exxon no intentaría adelantarse», expresó el director de inversiones de Pickering Energy Partners, Dan Pickering.
Las dos empresas son socias en proyectos en otros lugares y la disputa indica lo valiosos son los proyectos de Guyana para Exxon, afirmó. «Obviamente, significa que el 30% de Guyana es realmente valioso y tal vez piensen que Chevron está entrando demasiado barato», señaló Pickering.
Exxon opera toda la producción en Guyana con una participación del 45% en el consorcio con Hess y la china Cnooc como sus socios minoritarios. En octubre, Chevron propuso comprar Hess con el objetivo de obtener la participación en Guyana.
Chevron dijo que las conversaciones «darán como resultado un resultado que no retrasará, impedirá o impedirá la consumación de la fusión». Sin embargo, también expresó que la disputa podría terminar en arbitraje si las dos partes no pueden llegar a un acuerdo.
«La disposición del derecho de preferencia no es aplicable a la fusión. Estamos totalmente comprometidos con la transacción y no creemos que estas discusiones impidan su finalización exitosa», dijeron Chevron y Hess.
Una interrupción de los términos del acuerdo afectaría al segundo mayor productor de petróleo de Estados Unidos, que trabajó en expandir la producción a campos de menor costo en el continente. Guyana también trabaja en atraer otros grandes productores de petróleo para recortar el dominio de Exxon en la producción energética del país.
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