China construye más de la mitad de las nuevas centrales a carbón del mundo
En 2021 se estaban construyendo unos 176 gigavatios de capacidad y más de la mitad pertenece a China, según un informe de Global Energy Monitor.
Un informe de Global Energy Monitor detalló que en 2021 estaban en construcción centrales eléctricas a carbón con una capacidad total de 176 gigavatios (GW). El 52% pertenece a construcciones en China. Según el escrito, lejos está el objetivo de reducir el uso del carbón para la producción de energía eléctrica.
Casi 200 países prometieron una «reducción gradual» del carbón en la cumbre climática COP26 el año pasado. Pero el informe de Global Energy Monitor refleja que aún no está cerca de disminuir. Por el contrario, está creciendo el número de centrales eléctricas de carbón a medida que las nuevas construcciones compensan el cierre de las centrales antiguas.
Los 176 GW se dividen en construcciones de 20 países, ubicándose la abrumadora mayoría en Asia. La cifra global apenas cambió en comparación con 2020: habían 181 GW en construcción a pesar del compromiso que insta a no desarrollar más proyectos nuevos de carbón para cumplir los objetivos climáticos.
“Es una historia mixta. En todas partes fuera de China, los planes para nuevas centrales eléctricas de carbón se han reducido drásticamente”, explicó uno de los autores del informe, Lauri Myllyvirta, del Centro de Investigación sobre Energía y Aire Limpio.
“Sin embargo, las empresas chinas han seguido anunciando nuevas centrales eléctricas de carbón y existe un respaldo gubernamental muy claro para ello. Esa es una señal preocupante”. No hay expectativas de que China cambie de rumbo este año, advirtió Myllyvirta, aunque dice que la promesa hecha por el país en 2021 de dejar de financiar proyectos de carbón en el extranjero ya ha visto cancelados 13 GW.
Fuera de China, el informe muestra que los planes en esta forma de generar energía se han reducido en los mercados emergentes, como los de Bangladesh, India y Vietnam. Este último, junto con Indonesia, se proponen de forma insistente como candidatos para un futuro acuerdo en el que países más enriquecidos financien la limitación el uso del carbón.
El año pasado se quemó una cantidad récord de carbón, lo que generó ganancias extraordinarias para empresas mineras y provocó que se hablara de un «regreso» de este tipo de generación eléctrica. Sin embargo, Myllyvirta dice que es «delirante» pensar que se trata de una «nueva normalidad», ya que el combustible solo se volvió atractivo temporalmente porque la gasolina se volvió muy cara.
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