En medio de la pulseada por el salario, Macri recibe mañana a las tres centrales peronistas

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Nuevo gobierno

Será el primer encuentro oficial, después de dos meses de gobierno y tras reiterados reclamos de los gremios peronistas. El presidente Mauricio Macri recibirá mañana en la Casa Rosada a los líderes de las tres CGT además de a connotados dirigentes sindicales en el contexto de la discusión por los salarios y de la caída masiva de contratos en el Estado. Aunque de otro orden, será además otra foto para el álbum de Macri con dirigentes peronistas, una relación que crece.

Cuándo se puso fecha al encuentro puede rastrearse fácil: la semana pasada Macri recibió reservadamente en Olivos al jefe de la CGT Azopardo y líder camionero Hugo Moyano, con quien diseñó el contacto, que se extendió a los otros jefes gremiales. Esa reunión –bastante demorada, a criterio del presidente de Independiente– se produjo después de un contrapunto entre el presidente de Independiente y ministros del gabinete sobre las proyecciones de inflación para este año y su impacto en la discusión salarial.

El encuentro está agendado a las 16.30. Hasta ahora hubo una llamada informal, y se descuenta que los gremios recibirán hoy formalmente la invitación. La lista reaviva la ilusión de la unidad de los gremios peronistas, que celebraron con esa intención un plenario en diciembre pasado.

Se espera que vayan a la Casa Rosada, además de Moyano, el metalúrgico Antonio Caló, quien se mantuvo alineado con Cristina Kirchner y Luis Barrionuevo, de la CGT Azul y Blanca. A ellos se suman el constructor Gerardo Martínez, “independiente”, Juan Carlos Schmid, de la poderosa Confederación del Transporte, alienado con Moyano, José Luis Lingeri, de Obras Sanitarias, y Momo Venegas, de peones rurales, cercano al macrismo.

Perón habría dicho de ellos: “se pelean, pero todos son peronistas”. La selección que hizo el gobierno dejó huella. Los líderes de las dos CTA cuestionaron que el gobierno los hubiera dejado afuera. (Ver “Malestar…”)

La discusión está centrada en el número para las paritarias. La situación se asemeja a la de los últimos años del kirchnerismo: no hay un índice oficial de inflación –antes era falso y hoy ha sido suspendida su difusión– para tomar como referencia.

La semana pasada las posiciones se tensaron. El ministro de Trabajo Jorge Triaca aseguró que el gobierno pretendía llevar el techo de la discusión a un 25% de aumento para todo el año. Las declaraciones de Triaca generaron una fuerte reacción entre los gremios. El gobierno se vio obligado a corregir al ministro, pero lo cierto es que desde Economía defienden la idea bastante optimista de que la inflación de este año no superará una banda de entre un 20 y un 25%. Debajo de los que prevén las consultoras.

De la reunión entre Macri y Moyano surgió que el Presidente habría presentado una serie de medidas que prevé tomar para reducir el impacto de la inflación en el salario, entre las que se mencionan cambios en el impuesto a las Ganancias y la reducción del IVA para productos de la canasta básica. Además de la tradicional promesa sobre la devolución de fondos de las obras sociales.