En el conglomerado Neuquén-Plottier es más difícil cumplir la cuarentena
Así surge de un informe académico que encargó el gobierno nacional para conocer los efectos sociales del aislamiento. En la provincia se detectaron problemas por la caída de ingresos en cuentapropistas, desabastecimiento en mercados de barrio y hacinamiento.
Un informe realizado por un grupo de investigadores en Ciencias Sociales que relevó los efectos del aislamiento en todo el país detectó que el área de «conurbación» entre los barrios del oeste de Neuquén y Plottier fue el que presentó mayores dificultades en la provincia para cumplir con la cuarentena obligatoria.
El documento informó que en ese sector se presentaron dificultades económicas por la caída de ingresos de cuentapropistas y trabajadores informales, a las que se sumaron problemas por desabastecimiento en mercados de barrio (principalmente, en el oeste), hacinamiento y falta de acceso a medicación o prácticas de salud.
El informe fue realizado por la Comisión de Ciencias Sociales de la Unidad Coronavirus COVID-19 para el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación. Fue un trabajo de más de 500 investigadores y becarios del sistema científico y universitario nacional, quienes recolectaron información de 1.487 referentes territoriales que actuaron de «informantes clave».
El relevamiento nacional fue realizado entre los días 23 y 25 de marzo, por lo que indicaron que «puede ser considerado como una ‘línea de base’ del primer periodo de implementación de las medidas en vistas a lo que fue su extensión en el tiempo».
El objetivo general fue «proveer información sobre los impactos sociales
de la pandemia COVID-19 en el territorio nacional» y «las dificultades con las que se encuentra la población para acatar las medidas de aislamiento».
En el caso de Neuquén, la información presentada en el documento fue relevada por 25 informantes y procesada por 11 referentes académicos.
De los 25 reportes, 20 indicaron un acatamiento «en su enorme mayoría» y sólo cinco evaluaron que se acató parcialmente.
Se indicó que, en los sectores urbanos integrados del área de conurbación de Confluencia (Plottier y barrios ubicados en el oeste de la capital neuquina, Gran Neuquén Sur, sector Atahualpa; Oeste neuquino, Los Hornos, San Lorenzo), existen dificultades para acatar el aislamiento debido a inestabilidad laboral o baja pronunciada de ingresos, «que obligan a la búsqueda de generación de ingresos».
También se detectó la dificultad en la provisión de alimentos, «que conlleva desplazamiento por retiro de bolsones de comida o acceso a espacios comunitarios de suministro y hacia basurales para alimentación de familia y animales».
Otras dificultades encontradas en estos sectores fue la relativización de los riesgos de contagio y la magnitud de la pandemia debido a la exposición
constante a infecciones vinculadas a contaminación ambiental y contacto con basurales, poco acceso a servicios y falta de higiene urbana.
También en esta zona, especialmente en la capital, se reportaron problemas para acatar el aislamiento por la búsqueda de precios «debido a sobreprecios en artículos de primera necesidad».
En el medio rural-aislado (Caviahue, El Huecú, Las Lajas y parajes rurales de población criolla y mapuche; Departamento Minas, Andacollo, cabecera del departamento y sus 21 parajes aledaños; camino al paso Tromen; Paraje Quillén, Aluminé), se registraron dificultades debido a «descreimiento inicial en la implementación real de la medida». El informe señaló que ello «menguó debido a la presencia de controles policiales, la amenaza de penalidades y mayor visualización de la autoridad presidencial».
En estas comunidades también fue difícil cumplir el aislamiento por la necesidad de desplazamiento hacia otras localidades para la provisión de alimentos y productos para el hogar que no se producen en sus lugares.
El informe evaluó que el área de conurbación Neuquén- Plottier reportó la mayor variedad y combinación de problemas derivados de la cuarentena: económicos, de desabastecimiento alimenticio en mercados barriales, de aumento de precios y sobreprecios en artículos de primera necesidad, en acceso a la salud, condiciones de hacinamiento, ausencia de viviendas o problemas en las condiciones de habitabilidad.
También se detectaron problemas de violencia y maltrato policial en Plottier y el oeste de la la capital.
En zonas rurales, además de la baja de la actividad económica se acentúan problemas específicos derivados en la dificultad de acceso a alimentos, servicios complejos de salud y provisión regular de combustible.
Sobre la percepción respecto de la extensión de la cuarentena, los relevamientos indicaron una agudización de los problemas detectados, a los que sumaron la falta de dinero en zonas urbanas para la compra de garrafas. En zonas rurales, dificultad económica y logística para comprar leña.
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