Tips para comer sano y mejor: mitos, mentiras y consejos
Después de dos años largos de pandemia, con los hábitos alimenticios alterados, es u n buen momento para empezar a pensar qué comemos, y cómo nos organizamos . Consejos de la nutricionista Carolina Palmero.
La ilusión de la huerta propia, de amasar el pan todos los días, del regreso a la comida casera. Los dos años largos de pandemia nos pusieron frente a la posibilidad de volver a disfrutar de la cocina y de los platos hechos por nuestras manos. Pero en muchos casos, esos gustos vinieron unidos a algunos excesos, al sobrepeso, y a ciertas patologías que, según la licenciada en Nutrición Carolina Palmero (MPRN 9652), se ven cada vez más en edades más tempranas.
Consejos para que los más chicos coman sano
“Es cierto que durante la pandemia hubo más consumos de harinas. Como consecuencia, no sólo se ven hoy más casos de sobrepeso, sino también muchos perfiles metabólicos alterados: el colesterol alto, los triglicéridos, la glucemia elevada y algo que me preocupa mucho es que este tipo de patologías se ve en edades cada vez más tempranas. Patologías que antes eran propias de los adultos ahora se ven en chicos. El hígado graso, por ejemplo, que era rarísimo verlo en niños, ahora se hace presente en chicos de entre 8 y 12 años. O la acantosis pigmentaria, que es el cuello manchado propio del colesterol alto, y que ahora se ve cada vez más en chicos. Y eso, a mi entender, tiene que ver con el sedentarismo que nos trajo la pandemia. Aún hoy nos cuesta retomar los hábitos pre pandemia que tenían que ver con estar más activos”, explica la licenciada Palmero.
La especialista no cree que este aumento de ciertas patologías esté relacionado exclusivamente con haberse contagiado de Covid.
“Mucha gente tuvo covid y no tiene hoy este tipo de consecuencias, pero en cambio sí aparecen relacionadas con ese parate que sufrimos:dejar de ir al colegio, de jugar en la plaza, de ir y venir caminando al trabajo. Nos limitaron mucho el movimiento y además, el estar en casa más tiempo nos puso en una situación de mayor disponibilidad de alimento. No es lo mismo estar en el trabajo, donde uno no tiene nada, que estar en casa donde uno siempre tiene alguna comida a mano”, opina.
-Mientras duró la pandemia, se habló mucho de la huerta propia, la comida casera. A la vista de lo que menciona, ¿hubo un verdadero regreso a lo natural?
-En un principio sí, la gente empezó a cocinar en casa, se ordenó con la comida, quiso aprovechar el momento para crear hábitos saludables. Pero supongo que todos hicimos lo que pudimos. Muchos se ordenaron y comieron comida casera. Algunos pudieron sostenerlo y otros volvieron al apuro y a comprar comida. La otra cara de eso, es que si bien durante la pandemia hubo gente que cocinó casero algunos incurrieron en excesos. Una cosa es comer saludable, y otra es el exceso.
Palmero sostiene que lo m s importante para cuidar el cuerpo es ordenar la comida, tener hábitos saludables, y pensar en la alimentación desde el momento en que se hace la compra. “En este cuerpo debemos vivir lo que nos queda por eso es importante cuidarnos para hoy y para mañana, para prevenir enfermedades”, sostiene.
Y por eso, la nutricionista que lo más aconsejable es recurrir a la alimentación sencilla, no industrializada, buscando equilibrar todos los grupos alimenticios y respetando las 4 o seis comidas diarias.
Tips fundamentales y mitos
“Es muy importante mantener las 4 o 6 comidas al día . Eso nos posibilita un buen rendimiento físico e intelectual. El cerebro necesita azúcares para funcionar. Mantener esa conducta, de las 4 o seis comidas nos permite conservar la porción, mirar, pensar si está bueno o no. Cuando uno pasa muchas horas sin comer, luego come mucho, o apurado, sin visualizar la porción y pensar en lo que está incorporando. Independientemente de si quiero subir o bajar de peso, me parece necesario como conducta. El cuerpo necesita eso: el estómago trabaja y descansa, no podemos ni estar todo el día sin comer ni todo el día comiendo”, dice Palmero.
Grupos de alimentos. “Es necesario incorporarlos todos. Hay que pensar que si al mediodía comí carne, quizás a la noche mejor no. Si comí legumbres o algún cereal, en la otra comida es bueno incorporar verduras. Lograr el equilibrio de los grupos de alimentos que son: lácteos, carnes, frutas, verduras, granos, cereales y legumbres, huevos, y no mucho más”, agrega.
Lo más desaconsejable: “comer desordenado, porque después se juntan el hambre y las ganas de comer. Al comer estamos incorporando algo a nuestro organismo. Hay que ser consciente de eso. Si me ponen un paquete de galletitas adelante, es probable que me las coma todas. No hay disfrute cuando comemos desde el automatismo”, aclara.
Las bebidas colas: “Tienen mucho fósforo y por eso sacan el calcio. El fósforo y el calcio son dos minerales que están en equilibrio el cuerpo; si consumís mucho de uno, te quita el otro, por eso son tan malas las bebidas colas para los huesos y dientes”, dice.
Bebidas vegetales: “No son aconsejables. La bebida aconsejable es el agua, o una limonada casera. Todas las bebidas de la góndola del supermercado (sean jugos en polvo, cajas de jugos que prometen pulpa, aguas saborizadas) tienen un promedio de azucares al 10% que es lo mismo que tiene una gaseosa. Hay que pensar que por cada vasito pequeña, hay una cucharada sopera de azúcar. Es un montón. Y las leches vegetales son en realidad jugos industriales, que tienen colorantes y conservantes, incluso algunos que están prohibidos en otros países, como el colorante que le da el color blanco, y que es muy nocivo”, dice.
Alimentos: Una alimentación sencilla y no industrializada, es lo ideal”, subraya Palmero. “Hasta los alimentos más básicos tienen un grado de contaminación, pero si a eso le sumamos la industria, todo se pone más complejo”.
Escuchá la entrevista completa con la nutricionista Carolina Palmero, en «Digan lo que digan», por RN Radio
Sintonizá RN RADIO. Escuchanos por FM 90.9 desde Neuquén, por FM 105.7 desde Roca, por rionegro.com.ar/radio o por nuestra App.
Comentarios