Empresarios turísticos piensan en un verano “al 30%”
Los empresarios plantearon que la actividad "tarda en arrancar". Insistieron en que si la actividad se abre hoy, "la gente viene dentro de dos meses porque debe acordar sus vacaciones, evaluar ofertas, hacer su reserva".
La confirmación de que “habrá temporada turística de verano”, difundida esta semana el gobierno nacional, no generó mayor entusiasmo en esta ciudad, donde los empresarios del sector la recibieron con “cautela y preocupación”.
Esas palabras fueron las que eligió la presidente de la Cámara de Turismo de Bariloche, Belén García Bertone, ante la consulta puntual de este diario.
Dijo que en realidad la expectativa local es reactivar antes del verano y consideró que el mensaje de Nación parece dirigido más bien para las localidades de la costa atlántica.
El presidente de la Cámara de Turismo provincial, Néstor Denoya, también se mostró escéptico. “No es algo que genere nuevas expectativas -afirmó-. La única expectativa a esta altura es la de los hechos concretos. No lo que se dice sino lo que se hace. Que se abran las rutas y el tráfico aéreo, por ejemplo”.
En Bariloche durante meses se tomó como referencia la posible apertura de vuelos de cabotaje y del turismo estudiantil para la primavera, pero hoy ambas metas quedaron en suspenso y no hicieron más que profundizar el pesimismo.
“Podrían parar de corrernos el arco”, sugirió García Bertone.
Denoya dijo que si la idea es asegurar el flujo turístico para el verano ya debería existir certeza de fechas para anticipar la apertura con los ensayos necesarios, en forma escalonada.
Dijo que “si abrís hoy la gente viene dentro de dos meses, porque debe acordar sus vacaciones, evaluar ofertas, hacer su reserva. Es algo que tarda en arrancar”.
Dio a entender que sin un cronograma claro cualquier anuncio suena vacío. Admitió que para Bariloche un escenario realista es pensar en un verano “al 30%” de lo habitual, en actividad turística, con la esperanza puesta en funcionar a pleno recién el próximo invierno.
Aseguró que le cuesta entender por qué se demoran las habilitaciones cuando la cuarentena ya está muy relajada. “Es imposible poner en duda las imágenes de Buenos Aires, donde ves gente que va y viene para todos lados -observó Denoya-. Es indispensable que la provincia de Río Negro abra las rutas, como ya hicieron otras. Y que vuelvan los vuelos. Los colectivos y trenes en Buenos Aires funcionan todos los días, con sus protocolos y el cuidado que corresponde. No vemos diferencia entre eso y un avión. Se lo hemos planteado a los funcionarios de Transporte y de Turismo y no saben darnos ninguna razón”.
García Bertone dijo que en Bariloche la noticia de que habrá turismo en verano no produjo el efecto buscado. “Lejos de generar confianza, nos genera preocupación. Porque entendíamos que habría una reactivación antes”, afirmó.
Planteó que hará falta “un período de adaptaciones, paulatino, con menos gente, para ajustar los protocolos. Una fase de entrenamiento que tendría que empezar antes de fin de año”.
Señaló también que sin una coordinación entre las diferentes áreas de gobierno es díficil imaginarse una salida. “Falta una bajada de línea clara en relación con la apertura de rutas -explicó-. Faltan definiciones de Salud sobre lo que va a pasar con los 14 días de cuarentena, por ejemplo. Si cada turista va a tener que cumplirlo al llegar y después al volver a su casa. Hay que generar decisiones en ese sentido”.
Para Denoya, también es fundamental garantizar la movilidad, con las pruebas que hagan falta y con la convicción de que “si hay que retroceder se retrocede, como pasa en España o en Francia”.
“Hoy ya hay mucha información, no es como al principio de la pandemia. Está claro que el virus te mata, está claro que depende mucho del cuidado personal y que las personas de riesgo tienen que quedarse en la casa. (Hace falta) que no hablen más de protocolos y que empiecen a tomar decisiones”, recalcó.
Comentarios