Elecciones en Bariloche: los plazos en la mira por demoras de la Justicia
Hay una impugnación contra la lista del Frente Grande que no se resuelve todavía. El tiempo apremia por la impresión de la boleta única.
El Tribunal Electoral Provincial debe decidir esta semana si habilita al Frente Grande para participar en los comicios municipales del 1 de septiembre y también tiene pendiente un fallo por otra impugnación que pesa sobre el Frente de Todos.
Pero la demora de esa decisión y las eventuales apelaciones generaron fuerte incertidumbre sobre el cumplimiento del cronograma electoral y apareció entre las opciones una eventual postergación.
En la Junta Electoral municipal evitaron hablar del tema, pero reconocen que los plazos de impresión de boletas serán difíciles de cumplir. El problema es que no se puede enviar el original a la imprenta hasta que no quede definida la grilla de partidos habilitados.
El Frente Grande, que lleva como candidata a intendente a Andrea Galaverna, fue impugnado por el Frente de Todos (Daniel Natapof) porque aquel partido forma parte de esta última alianza a nivel provincial.
Julio Accavallo, presidente del Frente Grande, y candidato a primer concejal insistió en que no hay compromiso que les impida presentarse solos a nivel municipal. Eso es lo que debe definir la Justicia.
A su vez impulsaron una observación contra el Frente de Todos porque esa alianza (ex Frente para la Victoria) no habría sido inscripta a tiempo por el Tribunal Electoral.
El último descargo de las partes fue presentado el último viernes y el plazo para dictar sentencia era de 72 horas. Pero hasta hoy no hubo novedades. El Tribunal tampoco recibió todavía la opinión del procurador general, que por norma debe anteceder a cualquier fallo.
Accavallo anticipó que si son inhabilitados, tienen decidido apelar “ante el Superior Tribunal, la Corte Suprema y la Corte Interamericana”, porque lo considerarían “una proscripción”.
La misma voluntad tendría el Frente de Todos si el fallo les resulta desfavorable.
Lo que está en juego es el reparto del voto de cuño kirchnerista, ya que ambas fuerzas se alinean a nivel nacional con la fórmula que encabeza el candidato presidencial Alberto Fernández.
Un antecedente que comenzó a evaluar la Junta Electoral es el de 2015, cuando el Partido Socialista presentó lista pero la Junta local no lo oficializó por distintos incumplimientos. Recurrió a la Justicia y logró la habilitación cuando faltaban 20 días para el comicio y las boleta única ya estaba sorteada, homologada y en proceso de impresión.
La Junta de aquel entonces barajó la posibilidad de postergar la elección, pero luego se acordó con los apoderados rediseñar la boleta en plazos más cortos que los previstos por ordenanza. La nueva orden de impresión generó un sobrecosto del 30%.
Esta vez el presupuesto de las imprentas por ese servicio ronda los 180 mil pesos. Diego Tislak, vocal de la Junta Electoral, dijo que necesitan tener la boleta lista el lunes y cualquier demora complicaría los planes. Porque la boleta (más de 100 mil ejemplares) debe estar impresa diez días antes de la elección, para cumplir con las capacitaciones y las campañas de difusión.
Queda por determinar si estarán incluidos el Frente Grande (que por sorteo ocupa el tercer lugar) y el Frente de Todos (quinto).
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