El odontólogo de Cipolletti acusado de abuso seguirá con domiciliaria
El juez Guillermo Baquero Lazcano resolvió que “mientras persista el riesgo de vida informado por el Cuerpo de Investigación Forense” continuará preso en su casa.
El imputado dejó el penal en diciembre del año pasado.
El odontólogo de Cipolletti acusado de abuso sexual seguirá con prisión domiciliaria “mientras persista el riesgo de vida informado por el Cuerpo de Investigación Forense”. Así lo resolvió el juez Guillermo Baquero Lazcano. En una nueva audiencia de revisión de la medida cautelar, el magistrado dejó firme la resolución de su colega Laura González Vitale.
La única modificación fue el plazo de la modalidad. Vitale había definido que se mantenga por cuatro meses, mientras que Lazcano lo dejó supeditado a próximos informes médicos. Es decir que deben realizar nuevas pericias para determinar si el imputado está en condiciones de ir al penal.
El juez de revisión dispuso que se realice en el corto plazo una nueva audiencia para que las partes puedan demostrar con informes “si persisten o han desaparecido” los motivos de salud que fundamentaron la prisión domiciliaria a finales de diciembre que dictó la justicia cipoleña.
Tanto la fiscalía, como la querella y la defensa hicieron reserva de interponer eventuales impugnaciones, aunque no las plantearon en la audiencia.
En los informes médicos que se presentaron en dicha audiencia arrojaron que el médico no presenta ninguna enfermedad ni trastorno psicopatológico, aunque está angustiado por su situación penal desfavorable.
González Vitale se amparó en una serie de tratados internacionales para definir la nueva modalidad de la medida cautelar. Indicó, en ese momento, que el penal no estaba en condiciones de brindar la asistencia médica que requiere el profesional.
El odontólogo está acusado de haber abusado sexualmente de una paciente en el interior de su consultorio. Cuando la jueza Vitale le confirmó la prisión preventiva por cuatro meses quedó acreditado que el acusado intentó manipular a la víctima para que no revelara lo sucedido y como no lo consiguió se escapó.
La policía lo capturó en la Ruta 151 en una de los accesos de Cipolletti. En ese acto atentó contra los dos requisitos que ampara la medida cautelar: entorpecimiento de la investigación y peligro de fuga.
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