El juego del Calamar se vio en Avellaneda

Platense, con mucho orden e inteligencia, derrotó a Racing por 1 a 0 en el Cilindro de Avellaneda, por la 16ta fecha de la Liga Profesional, e incrementó el mal clima social que vive la institución albiceleste, ya que volvieron a repetirse los cánticos y silbidos contra dirigentes y jugadores.

Dirigido por Claudio Spontón, el Calamar llegó a los 19 puntos y Racing quedó con 22. La hinchada local vitoreó al exmanager e ídolo Diego Milito, quien se alejó de su cargo tras distanciarse del presidente Víctor Blanco.
Apenas comenzó el encuentro Racing tomó el protagonismo ejerciendo presión alta sobre la salida de Platense, con lo que logró la posesión de la pelota para generar algunas situaciones comprometidas para el arquero Luis Ojeda, quien las supo resolver con eficacia.

En los minutos iniciales del segundo tiempo, Racing naufragó en su insipidez, sin generar riesgo para el arco defendido por Ojeda, y Platense se mostraba satisfecho con tener a su rival controlado y lejos de su guardameta.
Racing buscó darle más profundidad a la ofensiva y ampliar el frente de ataque con el ingresado Lovera, pero Platense lo supo poner incómodo con mayor presión en el mediocampo.

Así, el visitante se fue animando hasta que a los 23’ tuvo un tiro de esquina, que fue despejado por un defensor , pero la pelota le cayó a Lamberti: tiró a colocar, se desvió en un futbolista local y entró al descolocar a Arias.
Luego del gol la tribuna de Racing volvió a manifestar su descontento con el plantel y la dirigencia a través del cantito “Milito hay uno solo”, como ya ocurrió en encuentros anteriores. Ya finalizado el encuentro, una lluvia de silbidos despidió a los jugadores

En Rosario, se vivió un final infartante con la victoria sobre la hora de Rosario Central 3-2 sobre Patronato. El Canalla lo ganaba desde los 4’ con un gol de Marco Ruben, pero el Patrón lo dio vuelta con dos tantos del uruguayo Sebastián Sosa, a los 44’ y a los 27’ del ST.

El Gigante “hervía” entre los insultos de la gente a los jugadores y a los dirigentes, en un trámite en el que los hinchas empujaban a su equipo, que a pesar de las dudas iniciales se animó a jugar con la pelota por abajo con los ingresados Vecchio, Gamba, Zabala, Lo Celso y Ferreyra.

Y así, cuando el partido se le había hecho más cuesta arriba, lo empató a los 39’: Gamba llegó al fondo y mandó un centro pasado para Luciano Ferreyra, quien la tocó de derecha al segundo palo.

Cuando al partido no le quedaba nada, llegó el golazo de la victoria, que también tejieron tres suplentes: Francesco Lo Celso enganchó por la izquierda y tocó con Gamba, quien tiró una diagonal y habilitó la solitaria entrada de Vecchio por el medio del área, que la metió abajo, junto al segundo palo, en un Gigante de Arroyito que se venía abajo.

En Mendoza, Godoy Cruz y Central Córdoba empataron sin goles en un partido parejo y de situaciones escasas.
El Tomba lleva tres empates al hilo (los dos últimos sin convertir) y alcanzó los 23 puntos. Los santiagueños, que cortaron una racha de cuatro derrotas seguidas y llevan cinco sin ganar, están penúltimos con 12 unidades.