El hospital público de Bariloche encabezó un operativo de donación multiorgánico
Ya se implantaron con éxito un hígado en una mujer joven mendocina y dos riñones en pacientes de Río Negro. Las corneas, por otro lado, ya se encuentran en banco del Incucai (Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante).
Un equipo del hospital Ramón Carrillo de Bariloche llevó a cabo un nuevo operativo de donación multiorgánico ayer por la mañana. Se trata del segundo procedimiento del año en la ciudad cordillerana que, en este caso, permitirá que cinco personas puedan recibir un trasplante.
El donante es un joven de 23 años que sufrió un accidente de tránsito cuando circulaba en su moto.
Germán Santamaría, coordinador hospitalario de Cucai Río Negro, recalcó que «ya se implantaron con éxito un hígado en una mujer joven mendocina, de 37 años, y dos riñones en pacientes de Río Negro«. Las corneas, por otro lado, ya se encuentran en banco del Incucai (Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante).
«Respecto a la parte hepática, vino un equipo del Hospital Central de Mendoza para llevarle el órgano a la paciente que estaba esperando. Los riñones fueron entregados, junto con las corneas, en la cabina de vuelo comercial de Aerolíneas Argentina para ser trasladados a Buenos Aires, donde irán llamando a los potenciales receptores, con prioridad de pacientes de Río Negro», aclaró el médico que se encargó de trasladar personalmente los órganos al aeropuerto de Bariloche, con custodia de la Policía de Seguridad Aeroportuaria y personal de la compañía aérea.
Del procedimiento en el hospital público de Bariloche, participó personal de múltiples servicios, como terapia intensiva, laboratorio, diagnóstico por imágenes, hemoterapia, neurología, quirófano, oftalmología y los choferes de las ambulancias.
Santamaría contó que «desde el momento del fallecimiento de la persona por muerte cerebral, se verifica su condición de donante. Si no es negativa, se lo considera donante. También se da aviso al Incucai respecto a un potencial donante, se empiezan a evaluar los órganos que pueden servir y se buscan potenciales receptores que sean compatibles«. Una vez que se comprueba que donante y receptores son compatibles, «se hace un mantenimiento del potencial donante«.
«Le agradecemos enormemente a la familia por la paciencia en la espera porque fueron 24 horas desde el diagnóstico de muerte hasta la donación efectiva; es decir, cuando se pueden sacar los órganos y trasplantar», indicó Santamaría y aclaró que «el procedimiento de ablación depende de cantidad de órganos. En esta oportunidad, fueron 3 horas«.
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