El conflicto de «El Petróleo» cumple un mes

CUTRAL CO (ACC) – Mañana cumplirá un mes la protesta que los trabajadores de la empresa «El Petróleo» llevan adelante en reclamo de sueldos atrasados. A pesar del tiempo transcurrido, los empleados siguen convencidos de que su protesta es justa y la afrontan con apoyo de sus familias y la comunidad, a la espera de que el conflicto llegue a buen término. No obstante, no descartan la posibilidad de formar una cooperativa de trabajo para seguir adelante con un servicio considerado «pionero» en la localidad.

Algunos de los que participan de la protesta han pasado casi una vida en la empresa. Jaime Burgos, por ejemplo, es empleado de mantenimiento desde hace 34 años. Su compañero Emilio Mesplatere, tiene 23 años como chofer de larga distancia y en su larga experiencia conoce de recorridos, horarios y peripecias; casi tanto como Juan Mardones, que «sólo» lleva unos 12 años en la firma.

Mientras esperan a que se dirima el conflicto desencadenado por el fuerte atraso en el pago de los sueldos, los empleados recuerdan que «El Petróleo» supo de una época dorada, en la que toda la economía giraba en torno a la YPF estatal. La petrolera, refieren, contrataba sus servicios para el traslado del personal o para llevar los hijos de los obreros a la escuela.

«El de entonces era un buen servicio, contaba con siete u ocho coches que hacían las combinaciones con empresas chilenas. Ibamos a buscar los pasajeros hasta San Martín o Junín de los Andes, dependía de la época, y para las fiestas de fin de año se llegaban a contratar hasta 14 colectivos», recuerda Mesplatere.

Como pasó la mayor parte de su vida atado al volante, Mesplatere conoce como pocos lo que significa llevar pasajeros a destino con el temor a quedarse a mitad de camino por la rotura de la unidad o por falta de gasoil.

Cuando sucede algún contratiempo, «el pasaje se descarga con el chofer porque piensa que tiene la culpa. Pero no es así, porque uno a veces no tiene más remedio que salir sin calefacción o sabiendo que en el camino se puede romper el coche», recuerda el experimentado chofer.

Mardones, su compañero, cumplió durante siete años el recorrido a Bahía Blanca y luego viajó desde 25 de Mayo a Neuquén, pero también trajinó la ruta Zapala- Neuquén y le tocaron varias veces hacer escapadas a Las Grutas, en viajes contratados especialmente.

Recuerda los buenos tiempos en que los sueldos se cobraban puntualmente, mes a mes, no como ahora que el atraso lleva ya más de un año. También añora la época en que las condiciones de los micros eran las adecuadas.

La decadencia de la compañía empezó hace dos años, según sostienen los empleados, cuando se hizo cada vez más difícil percibir normalmente los sueldos.

No creen que haya habido una administración desleal, pero resienten que la firma se fue «vaciando de apoco» por problemas judiciales y que en ese contexto se intentó crear una empresa «paralela».

Por eso ahora les preocupa no saber cuál será en definitiva el destino que el propietario, Germán Jara, le dará a la empresa.

«No puede ser que no tengamos plata para el gasoil o las gomas, cuando en realidad es una empresa pionera en la provincia y con servicios clave para los trámites a Neuquén y en otras localidades. No puede ser que la empresa no haya sido rentable», sostuvo Mardones.

«Hasta el último día estuvimos colaborando con la empresa y hacía 15 meses que no se cobraban los sueldos, así y todo le seguimos poniendo el hombro», relató Mesplatere.

Pero ahora hay que mirar para adelante, y los trabajadores están convencidos que si este conflicto termina con la creación de una cooperativa de trabajo, como propusieron los abogados en la primara audiencia ante la inspectoría zonal de la cartera de Trabajo, a pesar de todos los padecimientos, finalmente podrán salir a flote.

«Apoyo de la familia y la comunidad»

CUTRAL CO (ACC) – Los cerca de 50 trabajadores de «El Petróleo» mantienen la protesta en los talleres de la empresa con el incondicional apoyo de sus familias y de los vecinos que se acercan para donar comida o colaborar de cualquier otra forma.

Están instalados en los talleres que la empresa tiene en el parque industrial de Cutral Co, a la salida de la localidad en dirección a Zapala. Allí ubicaron uno de los colectivos como «casilla» y fue ahí mismo donde sufrieron el viernes pasado por la derrota de la selección argentina con Inglaterra, a través de un pequeño televisor.

«La familia nos ayuda, nos cocina, pero también vienen pasajeros que tuvimos y nos traen café por la mañana o una torta. La gente se portó muy bien. Es que se trata de una empresa de más de 30 años», dice Emilio Mesplatere.

Con todo, no les ha sido fácil afrontar, por ejemplo, el inicio de las clases de sus hijos. Si les piden materiales a los chicos, tienen que ir a la escuela para hablar con la maestra y explicarle cuál es la situación. Tampoco tienen para la ropa o las zapatillas.

Los servicios de electricidad y gas son otro drama. Remitieron una nota a la cooperativa Copelco, que al tanto del conflicto decidió no cortarles el suministro, al menos por un mes. El panorama es distinto con la distribuidora Camuzzi Gas del Sur, que no espera.

«Esta es la fuente de trabajo que tenemos y la vamos a defender. No le tenemos miedo a una cooperativa porque la haríamos funcionar. A pesar de todo, nosotros somos los hacemos que el servicio se cumpla», dice Mardones.