El Centro de Acceso a la Justicia recibió 4 mil consultas
Funciona hace dos años. Los principales requerimientos fueron sobre familia, violencia de género, delitos y tercera edad.
Ser un lugar de contención, escucha, asesoramiento y derivación es la labor que tiene el Centro de Acceso a la Justicia (CAJ) que cumplió dos años.
Desde su creación el centro que funciona en la ciudad de Neuquén recibió más de 4.000 consultas. El equipo de profesionales da respuesta integral a problemas en materia de familia, víctimas de delitos, violencia de género, conflictos entre vecinos, discapacidad y adultos mayores, entre otros aspectos.
Además como parte de su labor realizaron más de 150 talleres en diferentes temáticas de prevención.
“La gente en general desconoce mucho los derechos. Hay mucho mito. Llega con muchas dudas legales”, observó Sofía Rabert. coordinadora del CAJ,
Rabert enumeró que entre los temas que más se consultan son cuestiones de familia, violencia de género, problemas laborales y penales, trámites de seguridad social, migratorios y salud.
En casos de violencia de género se hace un trabajo articulado con la oficina de violencia del poder judicial. “Como se trabaja en el centro mucho en lo que es seguridad social, desde la oficina nos derivan casos”, apuntó.
También, el personal del centro acompañó en algunos casos a las víctimas al momento de hacer la denuncia en la fiscalía.
Otro tema muy consultado fue todo lo relacionado a seguridad social. Explicó que hay trámites, por ejemplo en la ANSES que son digitales, “y se hace la asistencia de crearle el usuario a la persona, de sacarle el turno y explicarle los requisitos”.
La coordinadora del centro dijo que son articuladores y facilitadores. Destacó que no solo se quedan “con lo que nos trae la persona sino en otras cosas que se pueda surgir en el camino”.
La gente en general desconoce mucho los derechos. Hay mucho mito. Llega con muchas dudas legales».
Sofía Rabert. coordinadora del CAJ, sobre la importancia de los talleres de capacitación que realizan.
Uno de los miles de casos que tuvo el centro fue el de Juan que llegó sin recordar su documento. El hombre hacía un mes que había salido de la Unidad Penitenciaria U9.
Quería regresar a Buenos Aires -lugar donde residía en el momento de la condena – pero no había podido hacerlo porque no tenía su DNI, y los colectivos de larga distancia se negaban a llevarlo. Tras una serie de averiguaciones el CAJ logró obtener sus datos personales. De esta manera, se iniciaron los trámites ante el Registro Civil y el Renaper y así lograron entregarle el documento a Juan.
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