Minería y licencia social

Río Negro concluyó el viernes un paso clave para aprobar el proyecto minero de Calcatreu, que busca explotar una mina de oro a cielo abierto en la meseta de la Línea Sur, a unos 60 km de Jacobacci. La audiencia pública convocó a cerca de dos centenares de expositores de la región y de la provincia. La mayoría de los asistentes se mostró a favor de la explotación. Aún así, quedan razonables interrogantes y temores en amplios sectores de la comunidad, que tanto la empresa como el gobierno provincial debieran despejar en próximos pasos.

“Río Negro será una provincia minera”, insiste el gobernador Alberto Weretilneck. Una afirmación que no debiera generar resistencias. Es real que, bien controlada, con altos estándares de calidad y respeto por el medio ambiente, la minería puede ser un factor clave para el desarrollo económico, como muestran los casos de Australia y Chile. Sin embargo, nuestro país también conoce casos donde las explotaciones dejaron poco y nada a las poblaciones locales y generaron un pasivo ambiental que terminaron pagando varias generaciones.

El Gobierno insiste en que ha aprendido de los errores pasados, cuando entre 2004 y 2006 un proyecto similar no logró la licencia social. Señala que el estudio ambiental es exhaustivo y la empresa presentó un detallado esquema de operaciones que incluyen controles rigurosos de la calidad del agua, manejo responsable de los residuos con tecnología avanzada y la restauración de las áreas intervenidas.

La aprobación del estudio de factibilidad ambiental el 15 de agosto pasado y la audiencia realizada el viernes en Jacobacci cumplieron con las formalidades de la ley. Pero organizaciones mapuches, comunitarias y ambientalistas, denunciaron el bloqueo a su participación efectiva y el privilegio a entidades cercanas al oficialismo y favorables de antemano al proyecto minero. La fuerte custodia policial que rodeó a la audiencia pública en Jacobacci se demostró innecesaria y la concentración en una maratónica sesión de 11 horas terminó desmotivando las intervenciones.

El próximo paso es el análisis de la Secretaría de Ambiente y Cambio Climático, última instancia participativa antes de la autorización formal para los trabajos. Esta presentación debería poder despejar dudas sobre quién y cómo controlará que los compromisos asumidos por Patagonia Gold Corp. se cumplan, quién y cómo tomarán las muestras y analizará el suelo, el agua, el aire; cómo se medirá la afectación de la fauna silvestre y la ganadería local, definir la superficie afectada, el destino y tratamiento de los residuos, el uso del agua, entre otros.

Beneficios y riesgos de la actividad minera

La minería a gran escala es una actividad que implica riesgos importantes: la contaminación del aire y el agua, la inestabilidad de los terrenos, la afectación del paisaje y de ecosistemas frágiles. Por ello, tienen estrictos protocolos de seguridad y operación. Como el “riesgo cero” no existe, también requieren de planes de mitigación y control de daños ante hechos excepcionales: accidentes, sismos o eventos climáticos extremos.

En lo social, el abandono de actividades económicas locales y el desplazamiento de poblaciones. En el caso de la Línea Sur, un intenso tránsito de personas y camiones podría ejercer una enorme presión sobre rutas y caminos precarios, de manera similar a lo que ocurre en Vaca Muerta.

Otra preocupación es que las explotaciones no se vuelvan enclaves extractivos: que usen mano de obra local y que el beneficio para las comunidades donde operan sea más que un “derrame” marginal.

Por ello, se requiere la participación informada de todos los actores e intereses involucrados, con un diálogo que permita abordar conflictos e inquietudes de la sociedad. Incluye transparencia, periódicas rendiciones de cuentas, acceso a información relevante y el respeto a los derechos humanos. La licencia social no es una formalidad administrativa. Implica que la empresa logre la aceptación de la comunidad y haya confianza en los controles que debe realizar el Estado para que se cumplan las exigencias de seguridad, ambientales y de desarrollo económico local. Antes, durante y después del desarrollo del proyecto.