¿Sin aumento?: por el paro de la CGT, el Gobierno pospondría la suba del salario mínimo

La administración de Javier Milei había adelantado que la reunión del Consejo del Salario se llevaría adelante a fines de enero. Sin embargo, evaluaría retrasarla. Graves consecuencias para planes sociales y jubilaciones en un contexto altamente inflacionario.

El Gobierno Nacional habría desactivado la convocatoria del Consejo del Salario, prevista para fines de enero. Esto es en respuesta a la tensión con la CGT, y otras centrales obreras, por el paro del próximo miércoles 24 en protesta en rechazo a las reformas laborales.

En un contexto de frenética inflación, el salario mínimo se mantendría en los 156 mil pesos, tras su última actualización en diciembre. Solo en ese mes tuvo una suba de 8,5%, contra un Índice de Precios al Consumidor del 25,5 por ciento.

La variable económica más crítica que depende del salario mínimo es el valor de los planes sociales, que se ajustan de manera automática y del cual dependen más de 1,2 millón de beneficiarios. También incide en los haberes jubilatorios y el seguro por desempleo.

El llamado al Consejo del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil había sido una de las primeras confirmaciones del Gobierno ni bien asumió. El propio secretario de Trabajo, Omar Yasín, había situado ese debate entre sindicalistas y empresarios entre el 20 y el 30 de este mes.

Sin embargo, todo habría cambiado luego de que la CGT declarase un paro de 12 horas para el 24 y contara para la ocasión con la adhesión de las dos CTA y el grueso del arco de los movimientos sociales tanto para esa medida como para la marcha proyectada al Congreso.

Héctor Daer, cosecretario general de la CGT, aprovechó este lunes su participación en el Congreso en el debate del DNU para reclamar «la urgente convocatoria» al Consejo del Salario.


Salario mínimo: número en caída


El Consejo del Salario cuenta con 32 miembros repartidos a medias entre representantes de centrales obreras (la mayor parte, de CGT, y algunas sillas para las dos CTA) y las cámaras patronales (comercio, industria, construcción, banca, pymes y bursátil) que deciden el valor de un índice. Solo el Estado, que suele oficiar de árbitro, es el pagador real del salario mínimo.

En los números con los que cuenta el Gobierno el salario mínimo experimentó el año pasado una suba de 124 por ciento entre abril y diciembre contra una variación de 156% en la canasta básica. La pérdida neta de poder adquisitivo es atribuible a la gestión de Alberto Fernández.

Con información de Ámbito


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