Para bajar el precio de los neumáticos, el Gobierno recortará aranceles a su importación
La medida busca acentuar la baja de la inflación. Se implementará de manera gradual, con ajustes trimestrales durante un año para facilitar la adaptación de las empresas.
Menos aranceles para neumáticos importados.
El Gobierno reducirá los aranceles de importación para los neumáticos, como parte de su estrategia para combatir la inflación mediante la disminución de costos y el fomento de la competencia en el mercado. Esta medida busca aliviar la carga económica que representan los neumáticos en el presupuesto de las familias que cuentan con vehículo propio.
El recorte impositivo se implementará con una resolución de la secretaría de Comercio, dependiente del ministerio de Economía. En total, serán cerca de 30 los productos que verán reducidos los aranceles para ser importados, entre ellos los neumáticos para automóviles y camionetas.
De cuánto será la reducción de aranceles a neumáticos
La norma establecerá una reducción inicial de cinco puntos en el arancel para los neumáticos de autos y camionetas, que pasará del 35% al 30%. Posteriormente, se llevarán a cabo ajustes trimestrales para eliminar 14 puntos adicionales en el plazo de un año, informó Infobae.
Este enfoque gradual tiene como objetivo evitar un impacto brusco en las empresas fabricantes dentro del país, permitiéndoles adaptarse a la nueva realidad y mejorar su competitividad frente a los productos importados.
La decisión de reducir los aranceles se enmarca en un contexto en el que cambiar cuatro neumáticos puede costar hasta $800.000, un gasto significativo que el Gobierno busca disminuir al ampliar la oferta en el mercado.
Reacciones del sector
A pesar de los esfuerzos del Gobierno, las empresas del sector neumático han expresado su preocupación. Argumentan que la reducción de aranceles se produce en un momento en que los costos de producción son elevados y que muchos países, como Brasil y Estados Unidos, están aumentando sus aranceles para proteger sus industrias locales.
Las empresas temen que el incremento de importaciones afecte sus operaciones y, potencialmente, sus plantillas laborales, ya que en los últimos dos años han tenido que despedir a más de 1.000 trabajadores debido a la crisis del sector.
La situación es delicada, ya que la competencia con productos importados de países asiáticos, que a menudo cuentan con subsidios agresivos, dificulta la capacidad de las empresas argentinas para mantenerse a flote. Las empresas están esperando que el Gobierno implemente otras medidas que puedan ayudar a mitigar el impacto de esta apertura de importaciones en la industria nacional.
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