Así quedó el paquete fiscal tras su paso por el Senado
Algunos títulos del paquete fiscal fueron aprobados, pero sufrieron modificaciones. El impuesto a las ganancias y a los bienes personales, entre los ítems rechazados en el Senado.
Por Cr. Parrilli Federico (CHINNI, SELEME, BUGNER Y ASOC.)
Esta semana, el Senado dio luz verde al paquete fiscal y Ley Bases con una serie de sorpresas y cambios significativos. Nos centraremos en el paquete fiscal, del cual hemos estado informando en esta columna desde que recibió la media sanción de la Cámara de Diputados.
El tratamiento en el Senado fue dispar, con aprobaciones y rechazos a ciertos capítulos de la media sanción de Diputados. Según lo manifestado por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, el Gobierno está decidido a revertir dichos rechazos en la cámara baja.
Lo que se aprobó con amplia mayoría fueron los capítulos referidos a la moratoria y plan de facilidades de pagos, el blanqueo de capitales, la eliminación del impuesto a las transferencias de inmuebles y las modificaciones al monotributo. No tuvieron la misma suerte las modificaciones en el impuesto sobre los bienes personales como así tampoco se logró revertir la reforma del anterior gobierno restaurando el impuesto a las ganancias para más trabajadores.
No se podrán incluir criptomonedas como bienes sujetos del blanqueo.
Esta aprobación supone una pérdida recaudatoria en el impuesto a las ganancias, pero se mantendría la recaudación en bienes personales al no regir el incremental de tasa para bienes en el exterior, un menor mínimo no imponible y el beneficio de reducción de tasa para contribuyentes cumplidores.
Sobre los capítulos que fueron aprobados también hubo modificaciones. En cuanto al blanqueo se determinó que no se podrán incluir criptomonedas como bienes sujetos del blanqueo, como se había establecido inicialmente.
Por otro lado, se especificó que los bienes inmuebles registrados a nombre de empresas solo podrán ser blanqueados si han sido previamente declarados por la entidad corporativa.
No se mantiene el régimen del monotributo social.
Además, se amplío de 5 a 10 años el período de inhabilitación para que los funcionarios puedan acogerse al proceso al blanqueo. También se dispuso la prohibición de ingresar al blanqueo a los familiares de los funcionarios, como los hermanos y todos los parientes hasta el segundo grado de consanguinidad.
Por último, se dispuso que las provincias puedan ofrecer herramientas para las inversiones productivas permitiendo que los fondos depositados en cuentas especiales puedan ser destinados sin tener que pagar el impuesto de regularización.
Se eliminó la total restauración del impuesto a las ganancias que pretendía el Gobierno.
La moratoria y el plan de pagos no tuvieron modificaciones. En cuanto al monotributo, se había incorporado la posibilidad que se mantenga el régimen del monotributo social. El mismo fue descartado por estar incluido en uno de los capítulos rechazados.
Por último, se eliminó la total restauración del impuesto a las ganancias que pretendía el Gobierno quedando los trabajadores con las modificaciones del año pasado. Al derogarse todo el articulado del impuesto a las ganancias, quedan aún sin resolverse las modificaciones que se habían sancionado por decreto el año pasado, que requieren de una ley para tener plena vigencia legal y poder liquidarse el período fiscal 2023. Cabe recordar que se prorrogaron las presentaciones de las declaraciones juradas anuales para la última semana de agosto.
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