Dudan de la calidad del agua en barrio neuquino

NEUQUEN (AN).- Para los vecinos del barrio Unión de Mayo de esta ciudad, conseguir agua potable se ha convertido en un gran problema. Desde hace quince días, el líquido presenta abundante cantidad de sedimentos y algunos vecinos aseguran que desde los grifos también sale algo que -aseguran- “parece aceite”.

Esta situación atenta contra el consumo cotidiano y mantiene preocupada a la población por el posible brote de enfermedades.

El agua, según pudo comprobar este diario, tiene una coloración turbia y, además, muestra diminutos residuos que se depositan en el fondo de cualquier recipiente, provocando el recelo de cualquier ansioso consumidor.

“No sabemos qué agua estamos tomando”, manifestó ofuscado el vecinalista, Segundo Zaccar, para quien el inconveniente es preocupante por las consecuencias que puede generar.

A pesar del problema, los vecinos reconocieron que no hicieron el reclamo al Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) porque, según opinaron, “es una pérdida de tiempo”.

Recordaron que durante cuatro meses convivieron con una laguna de aguas servidas ubicada en los alrededores del estadio Ruca Che, justo frente a sus viviendas.

“Hace más de un año que tengo problemas con el EPAS a raíz de la calidad del servicio que prestan”, dijo Zaccar. Y luego agregó que “la situación se complicó los días de altas temperaturas por el mayor consumo”.

El aspecto del líquido obligó a muchos de los vecinos a comprar agua mineral, con el gasto adicional que implica en la canasta familiar.

Sin embargo, no todos están en condiciones de afrontar el gasto. “Todos estos días hemos tenido que hervir el agua para poder tomarla”, señaló una mujer de la calle Los Copihues al 900.

Otro vecino de la misma cuadra señaló que “por suerte no tiene chicos porque así como sale el agua sería un riesgo que la consuman”.

El director del EPAS, Horacio Carvalho lamentó el trastorno, pero aseguró que no recibieron ningún reclamo desde esa zona de Neuquén.

Según explicó, el tanque ubicado en el barrio Gregorio Alvarez abastece de agua al barrio Unión de Mayo y como es punta de red, cuando se limpia el sistema, sale basura en algunas ocasiones.

En su opinión, una de las posibles causas del problema podría ser alguna rotura o conexiones clandestinas a la red que abastece de agua potable al barrio Unión de Mayo, uno de los más poblados y empobrecidos de la zona oeste de Neuquén.

Carvalho dejó en claro que ante la falta de personal “se hace lo imposible para mantener la continuidad y buena calidad del servicio”. Sin embargo, consignó que hoy, el organismo tiene el número de empleados para atender la demanda de una ciudad de 150 mil personas.

“Para la atención del sistema de cloacas hay una cuadrilla con siete personas y otra contratada”, alertó el director del organismo.

Y en relación a la falta de presión en algunos sectores de la ciudad, Carvalho explicó que el EPAS está produciendo 700 litros de agua por habitante, cuando el consumo común es de 250 litros.

“El problema es que se pierde mucho en el camino por el derroche”, opinó.

No obstante, subrayó que comparado con el año pasado el panorama es más tranquilo porque los reclamos disminuyeron.