Donde se reunían Godard, Truffaut y Chabrol

Buenos Aires (Télam).- Un homenaje en ocasión de los 50 años de vida de la prestigiosa revista francesa «Cahiers du Cinema», que iluminó con sus críticas los senderos de algunos de los más grandes autores del cine moderno, se realizará entre el 11 de enero y el 17 de marzo próximo, con la proyección de 63 filmes, en lo que promete ser una de las mejores formas de pasar el verano en la Capital Federal.

Se trata de una vasta y completa muestra que propone una revisión de medio siglo de cine, siempre a través de la aguda mirada de la legendaria revista francesa, y que debido a su extensión estará dividida en tres partes consecutivas: «Asalto al cine» (1952-1964), «Crónica de los años de brasa» (1963-1978) y «Nuevos horizontes» (1981-2001).

En la primera de esas secciones, que comenzará el 11 de este mes, se verán obras de grandes próceres del cine mundial como Jean Renoir, Jean-Luc Godard, Max Ophüls, Francois Truffaut, Alfred Hitchcock, Claude Chabrol, Howard Hawks, Ingmar Bergman, Roberto Rossellini, Kenji Mizoguchi, Nicholas Ray, Robert Bresson y Jacques Demy.

A partir del 4 de febrero y hasta el 22 del mismo mes, la segunda parte del ciclo, «Crónica de los años de brasa», incluirá filmes de Godard, Marco Bellocchio, Glauber Rocha, Pier Paolo Pasolini, John Cassavetes y Rainer W. Fassbinder.

Por último, en «Nuevos horizontes», la tecera parte del ciclo, se podrán ver films de Hou Hsiao-hsien, Edward Yang, Nanni Moretti, Takeshi Kitano, Lars von Trier, Abbas Kiarostami, André Téchiné, Jacques Doillon, Olivier Assayas y los films más recientes de Godard, Rohmer, Rivett y Chabrol.

El ciclo, que lleva el título «50 años de Cahiers du Cinema» y tendrá lugar diariamente a las 14.30, 17, 19.30 y 22 horas en la sala Leopoldo Lugones (Corrientes 1530), fue organizado por el Teatro San Martín y la Fundación Cinemateca Argentina, con el auspicio y la colaboración del Servicio de Acción Cultural de la Embajada de Francia.

Fundada en París en abril de 1951, con una editorial que se pronunciaba contra «una neutralidad perversa, que tolera un cine mediocre», «Cahiers du Cinema» no tardó en convertirse en una revista de una enorme influencia en el campo intelectual, capaz de redefinir conceptos y categorías, que luego darían nacimiento a lo que se conoce como cine moderno.

Alrededor de la figura tutelar del crítico André Bazin, todo un grupo de jóvenes -entre los que se destacaron Godard, Truffaut, Chabrol, Eric Rohmer y Jacques Rivette- propusieron una lectura apasionada y controvertida del cine.

Esa visión dio lugar en el terreno teórico a una «política de autor», que reconocía en ciertos cineastas (Bresson, Renoir, Hawks, Hitchcock, Bergman, Mizoguchi) un mundo propio, del que eran autores absolutos, y en la praxis parió la mítica Nouvelle Vage, la nueva ola que hacia fines de los años «50 removió las aguas estancadas del cine.

A partir de la década del «60, la revista fue incorporando nuevas firmas y planteos -más preocupados por las teorías semiológicas y por la política revolucionaria-, pero las sucesivas renovaciones generacionales mantuvieron siempre su espíritu intransigente y polémico, y una capacidad de descubrimiento por momentos visionaria.