Domiciliaria para Molina Ezcurra

Delitos de lesa humanidad en el Alto Valle

El oficial de inteligencia del Ejército condenado en dos juicios por delitos de lesa humanidad en el Alto Valle, Jorge Eduardo Molina Ezcurra, logró la detención domiciliaria tras cumplir los 70 años.

Molina Ezcurra permanece en la cárcel de Marcos Paz desde hace 7 años, condenado (con sentencia firme) a 21 de cárcel en 2.008 por el secuestros y torturas de 17 víctimas que permanecieron desaparecidas en La Escuelita de Neuquén en 1976. En el 2012 fue condenado a 19 años de prisión por tormentos y secuestros mientras integró el destacamento de inteligencia de Neuquén. Esta sentencia sigue en apelación.

En julio pasado el juez federal Eugenio Krom accedió a la petición de su abogado, Hernán Corigliano, quien solicitó el cumplimiento de la condena en su casa de Capital Federal luego de que el militar alcanzara los 70 años. El fiscal rechazó el planteo con el argumento de que “no es automático” alcanzar la edad estipulada para el extramuros, destacó el riesgo de fuga debido a que Molina Ezcurra conoce que está en firme la primera condena, tiene una segunda condena similar y deberá enfrentar un tercer juicio en 2.015 por el homicidio de cinco desaparecidos.

Pero el juez consideró que debido a que le asiste el derecho, la negación de la prisión domiciliaria sería una “discrecionalidad judicial”, y que “solo circunstancias extraordinarias” podrían ir en contra de otorgarle el beneficio. Krom recordó que el condenado no puede abandonar el domicilio salvo previa autorización judicial, consideró que no dar lugar al pedido iría contrario a “razones de humanidad y derechos humanos” y sostuvo que la gravedad de los delitos cometidos y de las penas impuestas no alcanzan para suponer que se fugará, debido a informes de buena conducta en Marcos Paz y a los antecedentes de conducta intachable durante su salida.

Agencia Centenario.-