La Colonia Rural Nueva Esperanza pisa fuerte en DIGO

Luis Ferrari comparte semana a semana la historia de este barrio que es ejemplo de trabajo y producción sustentable.

Los productores apuestan al trabajo en el campo y la producción de alimentos saludables. Foto gentileza

Se presenta como profesional de un equipo de trabajo municipal. Estuvo en la Secretaría de Medio Ambiente en 1993 en el municipio de Neuquén. Es ingeniero agrónomo y docente e investigador de la Universidad Nacional del Comahue.

Si bien se jubiló muy poco tiempo atrás Luis decidió continuar bregando con un propósito que lo activa desde hace décadas, como académico, funcionario y ciudadano: la calidad de vida de los ciudadanos que habitan la colonia rural Nueva Esperanza, en la capital neuquina.

En el año 1993, el municipio de Neuquén y el Concejo Deliberante sancionaron la ordenanza 58-46/93, dando inicio a una política ambiental sectorial y abordando la gestión de residuos sólidos urbanos. Como resultado, se creó la Secretaría de Medio Ambiente, la primera en la provincia.

La ordenanza estableció la construcción de un relleno sanitario, a cargo de la Coordinadora Ecológica del Área Metropolitana Sociedad del Estado (CEAMSE), en convenio con el municipio. El relleno sanitario consistió en cavas revestidas con una geomembrana impermeable para evitar filtraciones. Sin embargo, la ordenanza no permitía el ingreso de personas para separar residuos.

La producción sostenible es un valor fundamental para los habitantes de la colonia rural. Foto gentileza

Para atender esta situación, se implementó un programa que brindó alternativas laborales a los ciudadanos que ingresaban habitualmente al basural. La mayoría optó por la producción granjera a pequeña escala, criando cerdos y cultivando huertas familiares. Esta iniciativa dio origen a la colonia rural Nueva Esperanza, que recibió sus primeras tierras en mayo de 1995. La comunidad decidió darle este nombre en busca de una nueva vida para ellos y sus familias.

Luis, junto a otros compañeros de trabajo, se encargaron de coordinar el proceso, interactuando con todas las áreas municipales y brindando servicios públicos, como el acceso a agua no potable a través de un camión cisterna.

“Estoy involucrado desde el momento en que se tomó la decisión institucional de crear ese espacio productivo en el periurbano del ejido para que la población dejara de trabajar en el basural de la ciudad. El propósito fue dignificar a un grupo de personas que lucharon y luchan por una mejor calidad de vida”, dice Luis que hoy protagoniza su microespacio en la aplicación DIGO. 

La colonia ha enfrentado nuevos desafíos debido al crecimiento industrial y la invasión de instalaciones relacionadas con la industria petrolera y gasífera. Esto ha generado conflictos con el uso del suelo permitido por ordenanza, que se dedica a la producción primaria. A pesar de las dificultades, los productores siguen apostando por el trabajo en el campo y la producción de alimentos saludables.

Producción de pollos en la colonia rural. Foto gentileza.

En la actualidad, solo algunos habitantes cuentan con tenencia legal de tierras, establecida en el programa de reordenamiento. Sin embargo, la falta de servicios básicos, como agua potable, ha sido una problemática persistente. A pesar de ello, los pobladores continúan trabajando en la producción de alimentos, sin recibir apoyo ni del municipio ni de instancias superiores.

«En un momento de crisis y escasez de alimentos, la colonia rural Nueva Esperanza se presenta como un ejemplo de producción de alimentos sanos y sustentables. Los pobladores y las organizaciones trabajan en la generación de ingresos y en la promoción de la producción de alimentos para la comunidad», asegura Luis a «RÍO NEGRO«.

Es necesario fortalecer este sector y promover una colaboración efectiva entre el Estado y las comunidades para garantizar el cumplimiento de las normas y el desarrollo de una producción alimentaria sostenible

Luis Ferrari. Ingeniero agrónomo. Docente e investigador de la Universidad Nacional del Comahue.

"Nueva esperanza" en DIGO:

Desde su lanzamiento, Luis lidera el espacio «Nueva Esperanza» que se estrena los lunes en la app DIGO: «Quiero que a través de ese espacio se conozca lo que hace la comunidad de la Colonia Rural Nueva Esperanza para trabajar la tierra y hacer huertas agroecológicas a escala familiar», expresó.

Su programa se estrena todos los lunes a las 17 en la agenda regional de la aplicación.

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Si querés sumarte igual que Luis, escribinos a digo@rionegro.com.ar y contanos cuál es tu idea, interés y propuesta. Te contestaremos enseguida.


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