DIGO: La psicología deportiva suma adeptos en la región

Cada vez son más los clubes y las instituciones que suman esta alternativa. Ezequiel Centeno cuenta su experiencia en DIGO.

La psicología deportiva cada vez gana más terreno en la sociedad. Se trata de una disciplina que forma parte de la psicología tradicional y que se encarga de ayudar a orientar a los deportistas en sus entrenamientos, en sus metas y en su bienestar.

El psicólogo en el deporte tiene un foco más amplio, encargándose de todas aquellas variables psicológicas que se relacionan con el rendimiento y la salud mental. Estas variables son por ejemplo la confianza, autoestima, motivación, atención, concentración o el nivel de activación, entre otras.

Desde siempre, la psicología ha sido clave para los éxitos deportivos. Confiar en uno mismo, trabajar con un discurso positivo y seguro o creer en nuestras propias posibilidades son elementos clave para poder competir de una forma eficaz y dar lo máximo de nosotros mismos.

Ezequiel se suma a «DIGO», la APP de «RÍO NEGRO».

Hasta hace un tiempo y pese a que la idea parece muy básica, el campo de la psicología deportiva no tenía demasiado peso en la sociedad. Hasta ahora. Jóvenes profesionales de la región eligen reorientar sus ejercicios profesionales o direccionarlos directamente al mundo del deporte.

Ezequiel Centeno tiene 27 años y vive en la ciudad de Neuquén. Eligió la carrera de psicología tras varios intentos en incursionar en otras áreas profesionales. «Desde muy chico practiqué deportes, vengo de una familia vinculada a esas actividades y siempre tuve en cuenta la posibilidad de vincular mi carrera con este universo», asegura Ezequiel.

P: La psicología deportiva está teniendo un auge en este último tiempo… ¿Cómo lo explicás?

R: La disciplina es muy amplia. Se está trabajando en un modo más abarcativo con la psicología de la actividad física y el deporte, ahí se abren muchas más posibilidades. No solamente se enfoca en los deportistas, sino en toda persona que practica alguna actividad. Hay un pilar fundamental que guía nuestro trabajo que es enfocarnos en el bienestar de la persona que realiza el deporte.

P: Por otro lado está el rendimiento…

R: Sí. Paralelamente nos encontramos con la importancia de mejorar resultados, eficacia y optimizar la práctica. Es importante procurar que la persona logre un estado de plenitud que le permita disfrutar de lo que está haciendo, aunque van a haber momentos de fatiga, cansancio y frustración durante el proceso. Si la persona no se encuentra del todo bien, la práctica nunca va a tener buenos resultados. Es a partir de ahí que lo personal y lo deportivo se conjugan.

Con 17 años siendo jugador de básquet comenzó a indagar sobre la psicología deportiva y hoy acompaña a clubes y jugadores de la región.

P: ¿Cómo ves la apertura de los clubes o asociaciones de la región para trabajar con profesionales en esta disciplina?

R: Hay posibilidad de trabajar con modalidades internas o externas. En esta última se hacen consultorías con personas en particular (técnicos, deportistas, familiares). Otra metodología es la de trabajar directamente dentro del club.

En la región se está dando la apertura de empezar a preguntarse cómo es trabajar con un psicólogo en el deporte de manera integral y permanente, no solamente cuando hay bajos rendimientos o resultados adversos en las competencias.

Ezequiel da clases hace tres años en la Escuela de Entrenadores de Fútbol, formando a futuros lideres en equipos. «Estamos por un buen camino en el intento de incluír la figura del profesional».

Cada persona tiene un rol dentro de la institución y es muy importante trabajar paralelamente con cada grupo para que no se asuman roles que no corresponden

Ezequiel Centeno, Licenciado en Psicología.

P: Pasó la experiencia de la Selección y el mundial y se habló mucho de la ayuda de los psicólogos deportivos en ese contexto… ¿Crees que ayudó a concientizar sobre la importancia de la asesoría psicológica?

R: Fue muy interesante lo que se logró. La Selección viajó sin su psicólogo y eso es llamativo. Fuera de esto, hay que destacar que los torneos cortos ponen en juego muchos componentes. La cohesión grupal tiene que ver con la sinergia, la afinidad y el conjunto de interacciones que componen al colectivo llamado “equipo”. En esta selección podemos ver un conjunto de valores que los identifica y los hace sentir un gran sentido de pertenencia.

La Selección, por nuestras características culturales, pudo sentirse muy presionada socialmente. Sin embargo, la chance de tener jugadores que ya habían transitado esa instancia, más el acompañamiento de otros jugadores como por ejemplo el «Kun» Aguero que, estando afuera del equipo, eligió sumarse para dar un acompañamiento, demuestra el sentido de pertenencia y la cohesión grupal que puede llegar a observarse de un equipo. Jugadores que quieren pertenecer al equipo aunque sea desde afuera de la cancha, “aportar desde el lugar que pueda”.

Su trabajo en el oeste neuquino:

Actualmente, Ezequiel trabaja con equipos y deportistas de la ciudad de Neuquén, como también con deportistas que están en otras provincias y países a distancia. Mientras estudiaba la carrera, comenzó a colaborar en una ONG con niños y adolescentes llamada «Barriletes en bandada», una organización que acompaña infancias en estado de vulnerabilidad económica y social. «Ahí aprendí cómo acompañar, escuchar y ser parte de un juego colectivo», asegura Ezequiel.

Además trabajó en conjunto con un refugio para varones adultos. Un espacio de transición para personas en situación de calle. Allí solicitó una cancha de fútbol sintetico para que practiquen «futbol callejero» un deporte que permite vincular al grupo y afianzar los lazos entre ellos.

El año pasado, Ezequiel trabajó para un club de fútbol en el contacto con los planteles, la dirigencia, los técnicos y las familias. «Cada persona tiene un rol dentro de la institución y es muy importante trabajar paralelamente con cada grupo para que no se asuman roles que no corresponden, muchas veces ocurre que la figura del entrenador o entrenadora asume un rol paterno o materno, o viceversa, un familiar asumen un rol de entrenador o entrenadora y a la larga esto puede ser muy perjudicial para la experiencia deportiva en general», agrega.

La psicología deportiva, en "DIGO":

Ezequiel Centeno se suma a «DIGO», la APP de «RÍO NEGRO» para comentarnos todo en torno a esta temática y sus protagonistas en la región. «En esta disciplina nos metemos directamente en el mundo del deporte, pero no olvidamos quien nos compone como personas».

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