Día Mundial del Corazón: advierten que Bariloche no tiene infraestructura
El jefe de Cardiología del hospital de Bariloche planteó que hay una epidemia cardiovascular, se refirió a las falencias en la ciudad cordillerana y recordó las medidas de prevención.
No baja la curva de contagios en Bariloche. Archivo
En el Día Mundial del Corazón, el jefe de Cardiología del hospital Ramón Carrillo, Pedro Zanardo, concientizó respecto a una epidemia cardiovascular vinculada a la obesidad, la diabetes y la hipertensión.
Precisó que Argentina registra alrededor de 100.000 muertes por año y recordó que un estudio en Bariloche evidenció que las estadísticas en la ciudad coinciden con los datos a nivel nacional.
“Esta epidemia está muy relacionada con nuestra forma de vida y lo que comemos. Más allá de las personas que mueren, hay que tener en cuenta que muchas personas sufren discapacidades luego de sufrir un infarto o un ACV”, indicó Zanardo.
La epidemia, añadió el médico cardiólogo, también demostró que “la gente se infarta cada vez más joven. Si bien la expectativa de vida hoy es de 80 años, muchas veces, el corazón no resiste”.
La incidencia aumenta con la edad y también en los hombres ya que las mujeres, en la etapa fértil, están protegidas por el nivel de estrógenos. “Las mujeres –señaló el médico- se infartan más después de la menopausia. Los hombres, a partir de los 40, estamos en una situación más expuesta a este tipo de enfermedades”, expresó.
El cardiólogo explicó que el estudio en Bariloche visibilizó que “pese a la cantidad de habitantes, la ciudad dispone de poca infraestructura desde el punto de vista cardiovascular; entonces el tiempo en que se tarda en hacer una consulta terapéutica en Bariloche es mayor que en otras ciudades con estructuras sólidas más avanzadas”.
Puntualizó que hay dos métodos de tratamiento: “el trombolítico y la angioplastia -que se está usando en todo el mundo-. Pero Bariloche solo dispone de un centro que hace angioplastías y no tiene convenio con Salud Pública. Entonces, desde el punto de vista sanitario, hacemos trombolíticos porque si no, hay que derivar a los pacientes al Valle”.
¿Cómo prevenir? Zanardo reconoció que son “tips sencillos pero difícil de llevarlos a la práctica”.
Insistió en que la práctica de actividad física no implica necesariamente ir a un gimnasio. “Si tengo que hacer un trámite a unas pocas cuadras, puedo ir caminando. En vez de usar una escalera mecánica, puedo usar una escalera común, podemos movernos y no usar tanto el auto”, planteó.
También advirtió que la alimentación sana “es uno de los grandes pilares”. “Sí a las frutas, verduras, semillas, carne. Pero no a los ravioles, chocolates y salchichas. El gran problema de la epidemia es la hipertensión por la cantidad de sal que usamos. Y por último, el cigarrillo. Pagamos para tirar humo. Fumar es una de las causas de infarto y de cáncer en la población mundial”, señaló.
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