Detectan un aumento de casos de grooming, el lado “B” de Internet
Así lo aseguró el fundador y presidente de una fundación nacional, Hernán Navarro, que lucha contra este delito que afecta a chicos y adolescentes. Informó que en la entidad reciben denuncias y decenas de consultas cada semana. Dijo que las niñas de entre 10 y 14 años son el segmento más vulnerable.
Qué pasa con los hijos de padres separados en la cuarentena, una pregunta habitual que llega a los Juzgados de Familia. Archivo
Los adultos suelen creer que los riesgos de que los chicos naveguen en Internet se reducen al mundo de las redes sociales convencionales, como Facebook, Twitter, Instagram, Snapchat o incluso WhatsApp. Hernán Navarro, fundador y presidente de la Fundación Grooming Argentina, advirtió que la amenaza del “grooming” atraviesa todas las plataformas de juegos infantiles más consumidas que parecen ser incluso, las más inofensivas.
Este abogado dará el jueves una charla gratuita en el Instituto Primo Capraro de Bariloche, sobre los casos de acoso sexual contra un niño a través de Internet.
“Tiempo atrás, entendí que una persona con solo hacerse perfil falso, puede llegar a arruinar la vida y la inocencia de un chico. Esa premisa me marcó para fundar esta organización en el 2014. La idea es mostrarle a la sociedad el lado B de Internet”, explicó Navarro.
Y fue contundente: “Este tipo de adultos que acosan y abusan de niños y adolescentes en Internet van a buscarlos donde saben que están”. Hoy, todos los juegos en Internet cuentan con un chat que pueda dar lugar a una situación de grooming.
Grooming, la nueva puerta de entrada a la trata
“El grooming se presenta en juegos, aplicaciones y en todo espacio en los que haya intercambio de mensajería entre usuarios. Este delito tiende a migrar al WhatsApp después pero el gancho se da a través de estas plataformas”, puntualizó el abogado.
El segmento más vulnerable a este tipo de delitos son los chicos de entre los 10 y 14 años, según la Fundación Grooming Argentina y, 8 de cada 10 víctimas son nenas. La práctica del sexting (intercambio de contenido sexual que termina compartiéndose), en cambio, se presenta en la adolescencia, entre los 14 y 17 años.
Si bien la ley que tipifica y penaliza el delito de “grooming” se aprobó en el 2013, seis años después no hay datos precisos respecto a la cantidad de casos. Navarro consideró que no hay una política pública a nivel nacional y enfatizó que “en los últimos dos años, hubo un notable crecimiento del delito”.
Hay que entender que somos ciudadanos digitales y que la tecnología no es neutral e impacta. Los chicos están solos hoy en Internet”.
Hernán Navarro.
La asociación recibe alrededor de 10 consultas diarias y en promedio, una denuncia cada dos días. “Hay que remarcar el grado de desconocimiento en Argentina ya que siete de cada diez desconocen qué es el grooming. De modo que solo tres personas saben de qué se trata”, aseguró.
Por lo general, la detección de un caso de grooming suele ser casual porque el adulto no sabe leer indicadores específicos de una víctima. La consulta llega cuando se le saca el celular a los chicos o se ingresa a un dispositivo móvil y se descubre un determinado escenario irregular. Rara vez a través de diálogo.
“Hay voces de alerta como los cambios repentinos en conducta, de humor, el bajo rendimiento escolar, fluctuaciones en los estados de ánimo y la modificación del lenguaje corporal”, especificó Navarro.
Los chicos no suelen reconocerse como víctimas. “Es difícil imaginar que del otro lado, puede haber personas que no son quienes dicen ser”, aclaró.
“El camino para los padres tampoco es la prohibición. Apelamos a mecanismos tendientes a la prevención en el día a día. Se sigue pensando en Internet como una mera herramienta de distracción y esparcimiento. Pero es importante ser consciente de que hay un lado B”, advirtió.
Respecto al rol de la justicia, Navarro respondió: “Si la justicia es lenta en delitos ordinarios, pensemos en casos en los que hay que determinar el origen del autor y recurrir a países del exterior”. Dijo que es clave la capacitación y el entrenamiento del operador judicial y las fuerzas de seguridad porque “las modalidades cambian vertiginosamente”.
Comentarios