Desbarataron contrabando de carne en Zapala

ZAPALA (AZ/RC).- Una inspección de agentes locales del Senasa permitió secuestrar poco más de media tonelada de carne vacuna ingresada ilegalmente en esta ciudad Los costillares y las medias reses fueron hallados en una carnicería local y se estima que entraron burlando los controles de la barrera sanitaria ubicada en Cutral Co y que impide el paso de carne con hueso a esta región en virtud del programa nacional de lucha contra la fiebre aftosa La investigación apunta ahora a determinar si se trató de un caso aislado o si se encuadra dentro de una práctica habitual, como se especula en diferentes sectores de la comunidad y del sector productivo Los ganaderos neuquinos han manifestado en varias oportunidades las debilidades que presentan los controles sobre la barrera sanitaria. Este es un ejemplo más de cómo es que llega carne con hueso de contrabando en cantidades importantes a los centros urbanos de las ciudades neuquinas "La fragilidad que presentan los controles de la barrera pone en riesgo la sanidad de toda la ganadería neuquina. Este es un esquema poco confiable y de alto riesgo", confió un importante productor al ser consultado telefónicamente por el tema La carne secuestrada será sometida a diferentes análisis para determinar su calidad sanitaria y en caso de ser apta para el consumo será distribuida en comedores comunitarios de la localidad. Oficialmente no trascendió el nombre del frigorífico al cual pertenecen las reses, pero se supo que la línea investigativa seguirá adelante. Al parecer, el Senasa tomó conocimiento del hecho a través de una denuncia anónima el sábado. La carne fue decomisada de inmediato y según se confirmó será donada a comedores comunitarios locales luego de pasar una serie de estudios destinados a revelar su estado. Los agentes intentarán ahora determinar si existe una red dedicada al contrabando de carne o bien si están frente a un episodio que no tiene vinculación con este tipo de especulaciones En principio, el comerciante implicado en el hecho recibirá una sanción económica que será ejecutada por el Senasa como la autoridad de aplicación. En caso de comprobarse reincidencia por parte de los establecimientos involucrados, la pena puede incluso derivar en la clausura temporal.