Las aventuras del gaucho del norte neuquino en Qatar: “A este Corvette le corro con el Rastrojero”
El conocido camarógrafo Carlos Monsalve es de Chos Malal, vive en Plottier y está en Bahréin camino a Doha. Frente a la parada de taxis donde almuerza con sus nuevos amigos los choferes, se encontró con esta nave y su reacción fue super divertida. Mirá...
El que busca encuentra. Y el conocido camarógrafo Carlos Monsalve lo sabe bien, por algo ya estuvo en cinco mundiales y tiene el sexto a cuatro horas de auto. Nacido en Chos Malal en el norte neuquino, radicado en Plottier, por estos días está en la isla de Bahréin en el Golfo Pérsico y el sábado tiene previsto llegar a Doha.
Hoy, temprano, se le dio por entrar a la página de la FIFA y chusmear en las entradas disponibles para el partido inaugural entre Holanda y Senegal. Le salió una leyenda que decía baja disponibilidad, pero insistió y pudo comprar una entrada. Estoy recontrafeliz», le dijo a VOY antes de irse a almorzar con sus nuevos amigos, los taxistas de la parada cercana al departamento que alquila.
Está en Bahréin porque es mucho más barato (paga nueve dólares por el departamento) y cuando cayó a la parada sin hablar una palabra de inglés y los taxistas se acercaron curiosos, percibió enseguida la inconfundible mirada de llegó un sapo de otro pozo.
Carlos estaba con sus alpargatas, la bombacha gaucha y el sombrero y lo solucionó en dos segundos: sacó la camiseta de Messi de la mochila y después la bandera albiceleste con la leyenda Chos Malal, Patagonia. Y ahí enloquecieron.
Fue una especie de amor a primera vista, porque desde entonces lo invitan a almorzar todos los días. Y hoy, antes de compartir el arroz con pollo y pescado que comen con la mano, Carlos detectó una nave espacial estacionada enfrente. Cruzó y filmó este video superdivertido.
La nave espacial era nada menos que un Corvette, legendario deportivo de Chevrolet. «A este le corro con el Rastrojero diésel», dijo y largó la carcajada. Y enseguida agregó otras opciones: «Con un Duna, un R 12, un Regatta, le hacemos pata ancha a este rodado», comentó. Después se fue con una sonrisa a comer con los taxistas.
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