Boca sin DT: Román y la danza de nombres
Después de echar a Battaglia por sus declaraciones reclamando refuerzos tras la eliminación de la Copa, empezó la danza de nombres para la sucesión. Ningún entrenador que llegue a Boca lo hará sin la aceptación de Riquelme.
Riquelme hoy dará a conocer la fórmula del oficialismo de cara a las elecciones en Boca. Gentileza.
A esta altura negar que las decisiones importantes en Boca las toma Juan Román Riquelme no tiene ningún sentido. Así como eligió que Sebastián Battaglia fuera el reemplazante de Miguel Ángel Russo a mediados de 2021, fue el que “bajó la guillotina” que terminó con el ciclo del exjugador más ganador de la historia del xeneize.
Y es el mismo presidente del Consejo de Fútbol que tiene que elegir o dar el visto bueno para el entrenador que venga. Por eso la danza de nombres se relaciona directamente con los gustos futbolísticos de Román.
El detonante no parece haber sido la eliminación contra Corinthians por la Copa Libertadores, sino las declaraciones posteriores de Battaglia.
En la conferencia de prensa luego de quedar afuera, el exvolante azul y oro ventiló que había pedido refuerzos y la dirigencia no se los trajo. Además deslizó que no tenía plantel para hacer mucho más.
Pese a la aclaración que intentó al día siguiente, Sebastián fue echado por el Consejo, donde nada se resuelve sin que Román de la última palabra. Aquellos que lo habían sostenido cuando su gestión era cuestionada por el bajo nivel futbolístico, fueron los mismos que lo cesantearon tras haber ganado dos títulos y la dolorosa eliminación de la Copa.
Por eso ahora se busca reemplazo y en ese camino empezó la danza de nombres. Uno es Diego Martínez. El DT de Tigre tiene un estilo protagonista, con movimientos trabajados, la capacidad para potenciar jugadores y un particular ojo para detectar talentos jóvenes.
Ya trabajó en Boca, en las inferiores como técnico de pre-novena y fútbol infantil. En esa etapa dirigió a futbolistas del plantel actual como Molinas, Almendra, Weigandt y Sández.
También surge entre los supuestos candidatos Sebastián Beccacece, que le puso su sello a Defensa y Justicia y está bien visto por Riquelme pese a los fracasos en Independiente y Racing. Las dos experiencias en los clubes de Avellaneda lo ponen al exayudante de Jorge Sampaoli como uno de los menos queridos por el público.
Lo mismo ocurre con el extécnico del Marsella y quien condujo (o al menos intentó) la selección en Rusia 2018. Sampaoli quedó libre tras su paso por el equipo francés y junto a Beccacece son los menos aceptados por el hincha.
Claro que, si Román toma esa decisión, los fanáticos lo respaldarán porque el máximo ídolo del Xeneize es “palabra santa” para gran parte de ellos.
Según trascendió ayer, la intención es que el nuevo DT no tenga que ver con la historia del club, al menos en el corto o mediano plazo .Tras las experiencias de Rodolfo Arruabarrena, Guillermo Barros Schelotto, Russo y Battaglia (en el medio pasó Gustavo Alfaron en 2019), el Consejo tendría decidido que el próximo técnico sea “de afuera”.
Además de los apellidos mencionados, el que apareció con más fuerza apenas se supo de la salida de Battaglia es el de Ricardo Gareca. El Tigre viene de quedar afuera del Mundial con Perú en el repechaje y no definió su futuro. Desde su salida de Vélez hace varios años, donde tuvo un gran equipo, fue campeón del torneo local y semifinalista de Libertadores, siempre sonó para Boca.
También es un técnico que apuesta por el fútbol ofensivo, aunque tiene virtudes como el manejo de grupo que también son muy valoradas en el medio.
La única contra para Gareca es su historia como jugador. Junto a Oscar Ruggeri pasaron de Boca a River a mediados de los 80’ y los hinchas que tienen más de 40 años no tienen buenos recuerdos de ese gesto.
Al mismo tiempo, esa historia no es registrada por los más jóvenes y, de alguna forma, para otros ya prescribió.
Otro apellido que suena fuerte es el de Gabriel Heinze, de buenos trabajos en Argentinos Juniors y Vélez, aunque con una personalidad fuerte que implica un dominio importante de las decisiones futbolísticas y confrontarse a la prensa (esto último no sería un problema teniendo en cuenta los comportamientos de los integrantes del Consejo).
Lo cierto es que el cargo de entrenador de Boca es codiciado y al mismo tiempo genera incertidumbre. No cualquiera puede ocuparlo con éxito y más de uno lo sufrió. En estos tiempos, se suma el peso que tiene Riquelme, cuya influencia en el fútbol del Xeneize es total junto a sus secuaces.
El anuncio del nuevo DT se hará por twitter, en el perfil que tiene el club, como pasó con la salida de Battaglia. Síntoma de estos tiempos en la institución de la Ribera donde la decisión la tiene Román.
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