Análisis: Boca y Racing, el partido por un puñado de dólares
Los dos equipos argentinos se enfrentan mañana en Abu Dhabi en una Supercopa inventada que les deja mucho dinero.
“Por un puñado de dólares” es una de las películas icónicas del siglo XX. Aquel film protagonizado por Clint Eastwood en 1964 podría oficiar de preludio del partido en cuestión.
Mañana se juega una final que no estaba en el reglamento. Desde las 12:30 de nuestro país, por DirecTV Sports y Flow, Boca y Racing se enfrentarán en la Supercopa Internacional en Abu Dhabi, que pese a su nombre tiene carácter de copa nacional.
Cuando terminó el año futbolero en Argentina, antes del Mundial de Qatar, esta definición no estaba en el mapa. El contrato que AFA había firmado con los responsables de los capitales árabes contemplaba la disputa de la Supercopa Argentina en esas latitudes, enfrentando al ganador de la Liga Profesional y al de la Copa Argentina.
Sin embargo, como fue Patronato el que se metió en ese partido, la final perdió atractivo y con los dólares en la mano los jeques forzaron la final que se disputará mañana.
Hasta la letra chica es paradójica, porque el criterio de clasificación lo metió a Boca por la ventana, pese a haber sido el que más ganó entre los equipos de primera en 2022.
Según el reglamento creado para justificar esta Supercopa Internacional, la final se debe jugar entre el equipo que más puntos sacó en la tabla general del año y el ganador del Trofeo de Campeones. En ambos casos, el equipo que hizo los méritos fue Racing y el Xeneize entró por ser subcampeón del Trofeo de Campeones.
Desde el punto de vista deportivo, es poco serio que se invente una final sobre la marcha eligiendo a los equipos a dedo y, en este caso, perjudicando a Patronato. La final entre Boca y el equipo de Paraná no tiene fecha ni sede.
Está resolución de la AFA generó malestar en Patronato a lo que el presidente Oscar Lenzi aseguró que el club de Paraná se sintió “manoseado” y “muy dolido” por la decisión de la entidad que encabeza Claudio “Chiqui” Tapia.
“Estas actitudes y cambios duelen, te sentís manoseado porque se modifican los valores económicos por los que se juega pero además duele la ilusión de que íbamos a jugar una copa afuera”, remarcó Lenzi.
La realización del encuentro se explica desde los números. Además de los beneficios que facturará AFA, los clubes recibirán 1.300.000 dólares cada uno solo por participar y el que gane la Supercopa Internacional aumentará ese premio, porque el que levante el trofeo cobrará 200 mil dólares más.
Como si esto fuera poco, los planteles viajaron gratis, con la logística garantizada por el país sede. En tiempos de crisis y con un tipo de cambio tan desfavorable para las instituciones, este negocio a través del fútbol le vino bárbaro a ambos clubes y a la AFA de Claudio Tapia.
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